Capítulo 15

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(1 semana después)

Me encontraba de camino a la casa  eran las 7:30pm hoy salí tarde por qué había mucho trabajo pendiente, de repente siento  siento que tiran de mi

Un hombre con capucha, muy sonriente, saca un cuchillo y me mira.

-Este es un regalito que te mandan, una persona muy especial-

-No lo hagas porfavor, yo te doy dinero eso es lo que quieres- digo de manera suplicante.

-No por esto me pagaron muy bien-

Yo le pegó un cachetada, y le me entierra el cuchillo a un costado de mi barriga y otro en la pierna.

El se fue corriendo y yo me apoye en una pared.

Yo lloraba de dolor, del solo hecho de perder a mis hijos.

Siento que mis ojos se van a cerrar en cualquier momento.





Hasta que no pude más y caí en un profundo sueño.

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Narra Margarita.

Mi niña Lili no llegaba y eso me preocupaba mucho hace mucho tiempo que me avisó que ella vendría.

Es que tengo una angustia muy grande en mi pecho son las 8:30 y todavía no llega.

Decido salir a buscarla, cuando la veo tirada en el suelo en un charco de sangre.

Corro hacia ella y le tomo el pulso, me pongo a llorar mientras llamo a la ambulancia.

También llamo a Ricardo, el es un muchacho bueno.

El teléfono repicaba y ya luego me atendió.

-Hola señora cómo está-

-Muchacho, hirieron a mi hija, a mi niña, ahorita estamos camino al hospital por qué la apuñalaron, se que tu eres importante para ella- digo llorando.

-Mandeme la dirección ya voy para allá- luego de esto el cuelga.

Cuando llegamos a mi niña la bajaron y se la llevaron a urgencias.

Quise ir con ella pero un enfermera no me dejó.

-Señora no puede pasar se le informará cuando el doctor la recibe puede esperar aquí- cuando dijo eso se fue.

Yo sólo podía llorar, es que yo a ella la quiero como mi hija.

Estaba esperando y llegó Ricardo cuando me vio me abrazó muy fuerte y yo solo lloré más.

(2 horas después)

Llevábamos esperando 2 horas y yo ya estaba que no podía más con la angustia.

Llegó un doctor y dijo.

-Familiares de la señorita Liliana López- me pare inmediatamente.

-Yo soy su mamá, dígame cómo está mi hija por favor-

-Lo bebés gracias a Dios no sufrieron ningún daño, de todas formas ya se le hizo un ecocardiograma para verificar que todo esté bien, por suerte lo está, ella sentirá mucho dolor por qué por su condición no se le puede dar ningún medicamento, la herida de la pierna le dolerá un poco también, pero le recomiendo ponerle algo frío para bajar lo inflamado-

-La podemos ver- digo

-Claro ahorita está dormida, y así va a estar  un rato más-

Sed de venganza.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora