LIMERENCIA || Hugo y Eva.

Capítulo 6.

POV Eva.

El reloj marca las 21:30. Ya era la hora de la fiesta en casa de Hugo y Samantha.

Llevo lista de hace un rato, pero mi hermano, para variar, está tardando más de lo previsto.

Al poco, sale ya vestido con una camisa y unos pantalones vaqueros. Yo iba vestida con algo sencillo, un mono negro con chaqueta. La verdad que no me he comido mucho el coco para la vestimenta, aunque tampoco quiero ir hecha un cuadro, es mi primera fiesta aquí en Alemania y quiero dar buena impresión con los del instituto.

- Eva, ya sabes, nada de alcohol y por favor, haz caso a tu hermano. - Dice mi madre, a lo que asiento sin echarle mucha cuenta.

Qué asco ser la pequeña de la familia, por ser mayor puede hacer de todo y es creo que el más inmaduro y más irresponsable de los dos, pero por tener 18 tiene dos dedos de frente, y no.

Salimos de casa y ahí nos espera Samantha con un vestido, con un color característico como es el rojo vino. Sin duda le queda espectacular, pero mi hermano, anterior lío suyo, no le echa mucha cuenta. Tremenda diosa que tiene delante y no le suelta ningún piropo.

- Vas guapísima, Samantha. - Me acerco a abrazarla y ella me corresponde el abrazo, soltando una risa.

- Tu también vas guapísima, boba. - Reimos ambas y miramos a mi hermano. Se había quedado atrás para no interrumpir y le dio dos besos a Sam, a lo que yo la miro con cara de pillina.

Esta semana ellos habían quedado varias veces para liarse, no eran nada más que eso.

Empezamos a andar pero acaba resultando algo incómodo el silencio durante el camino, supongo que yo también aquí enmedio pues pinto poco, pero bueno.

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Llegamos a la casa de Samantha y pasamos. Lo primero que visualicé fue muchas luces de colores, destacable en una fiesta, claro, y también la música a todo volumen, viendo gente también con vasos hasta arriba de alcohol.

Tuve que detener mi mirada en aquellos ojos verdes, fijos en mí totalmente. Hugo no me quitaba ojo, dedicandome una sonrisa ladeada, a lo que se lo devuelvo con una pequeña sonrisa también.

Me fijo en su vestimenta. Iba con una camisa blanca, con los primeros botones abiertos y con unos pantalones grises. Joder, se ve realmente sexy y es algo que no puedo evitar pensar.

Agito mi cabeza para volver de mis pensamientos y miro a Samantha, la cual conversa con Marcos.

No los voy a molestar así que me abro paso para buscar la zona de bebidas, para al menos tomarme un Coca-Cola, pero una mano se posa en brazo para agarrarmelo y me giro rápidamente.

- Joder, Hugo, ¿eres imbécil? Qué susto.

- Qué bien recibes a tus alumnos, tapón.

Río un poco sin poder evitarlo negando y paso mi mano por mi brazo para acariciarmelo.

- ¿Buscas algo?

- Sí, ¿las bebidas?

Señala su bebida. - ¿Quieres la mía? No tengo muchas más ganas.

Niego rápidamente. - No bebo alcohol, aún así gracias. - Él alza las cejas soltando una pequeña risa.

- Una fiesta sin beber... chungo, pero bueno, ven. - Se gira y se dirige a una zona con bebidas.

Le sigo como puedo, metiendome entre la gente y veo como saca Coca-Cola, Pepsi, Fanta y agua.

- Espero que al menos no bebas agua, no seas sosa tampoco.