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¿Alguna vez te has preguntado que pasa después de la muerte? El siguiente paso es el descanso eterno, pero hay almas que no pueden descansar en paz, pues al tener misiones pendientes o no saber como murieron son condenadas a vagar en el mundo de los vivos buscando ayuda y consuelo en aquellos capaces de ver más allá de lo físico.

Haruto es una de estas personas, capaces de ver y percibir más de lo que cualquier persona podría.

Aunque esa condición le ha traído algunos problemas como convivencia con los demás, lejanía, pero simplemente no puede ocultar lo que es. Tuvo la suerte de encontrar a alguien que no lo juzga por ello, y que cree en él.

Buscando ayuda por su propia cuenta, durante toda su vida ha aprendido sobre su don y sobre aquellas almas, encontrandose con muchas en su camino, aprendiendo sobre la vida después de la muerte y del descanso eterno al qué muchos son negados.

Actualmente vive solo, con futuros planes de mudarse junto a su novio, Kim Junkyu. Aunque realmente sería él quien iría a vivir a su casa.

Su relación ha ido de lo mejor desde hace dos años que llevaban. Para Junkyu era interesante y asombrante todo lo que Haruto podía ver y decirle, aunque admitía que al principio no le creía, pero las conductas extrañas y diferentes de Haruto le hicieron creerle con el tiempo.

Con el tiempo había aprendido a lidiar con aquel don, usándolo para su beneficio y ayudar cuando podía hacerlo. Entre lo mejor que había obtenido de ello, había sido dos amistades que había conseguido en un viaje junto a su familia, sus nombres eran Jeongwoo y Junghwan, dos jóvenes, quienes no podían llegar al descanso eterno, y esa era la razón por la que seguían ahí; sin embargo, no estaban listos para dejar esa vida, así que poco les importaba saber por qué no podían pasar a su descanso eterno, se sentían bien con Haruto.

— ¿Estás seguro de hacerlo? — preguntó Junghwan dudoso mientras veía a Haruto dormir. Jeongwoo estaba a su lado con un balde de agua.

— Haruto dijo que lo despertaramos temprano. — respondió el otro asegurandose de que el agua estuviera fría.

Junghwan se hizo a un lado y finalmente se encargaron de mojar a Haruto para despertarlo.

Su víctima se levantó enseguida temblando de frío.

— ¿Lo ves? Funcionó. — dijo Jeongwoo con una sonrisa.

— Si pudiera golpearte, lo haría. — habló tomando una toalla.

— Haruto, no podíamos despertarte, es lo único que se nos ocurrió. Y vaya que gastamos energía para esto, así que probablemente no tengas luz. — dijo Junghwan.

Haruto se acercó a la lámpara encendiendola. Había exceso de energía, así que terminó haciendo corto circuito y se apagó de inmediato.

Los "fantasmas" se clasifican en distintos tipos, en este caso, hablamos de almas estancadas, que no sabían por qué no podían llegar al descanso eterno.

De esta manera, hay algunos fantasmas que pueden mover o tomar cosas, que son aquellos que no terminaron su misión de vida, dejándola incompleta. Pero Junghwan y Jeongwoo eran fantasmas que no podían mover cosas, eran solamente espectros sin poder alguno en el mundo de los vivos, pero podían hacerlo si lograban concentrar energía en sí, trayendo como consecuencia irregularidades en el campo electromagnético, causando sobrecargas eléctricas.

Ghost - [HaruKyu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora