Beloved Nene ❀ 『 AmaNene 』

▒⃟҉♡ˎˊ- ━━ 09: Princesses Don't Cry

Dios santísimo. ¿Ese era tu plan desde el inicio?.

Mi amor, ¿porque no me habías dicho desde el principio?, podría haberte ayudado, así no hubieras terminado dañada por mi maldito hermano degenerado. Pero estoy agradecido que tu plan haya terminado bien. Ahora ya no tendremos ningún problema, ¿verdad?.

Oh, bueno, quizás sí.

Ahora no me gusta nada saber que tu padre es agente de policía. Ya me veo vestido de criminal y entre las rejas por intentar pedir ser tu pareja.

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Tras no entender absolutamente nada de lo que sus amigos hacían, ambos hermanos pidieron una explicación al respecto, la cual fue negada en lo absoluto y los dejaron con una preocupación de lo que fuera hacer, aunque Tsubaki se hacía a la idea de que quizás, y solo quizás, está estaba tratando de hablar con él hermano faltante.

Se mordía las uñas porque no fuera así.

— Nene-chan dice que ya está de camino a su casa, parece que su papá a venido a recogerla.— comentó Aoi tras sacar su celular al recibir un mensaje.

— Bien, menos mal.— suspiro el de cabellos naranjas.— Ahora, ya pueden irse, no perderé más mi tiempo con ustedes.

— ¿Cuándo piensan decirnos lo que pasa?, Yashiro me preocupa.— dijo el Yugi mayor.

— Se los dirá ella a su tiempo, así que no se entrometan.— Akane tomo la mano de su novia y pronto comenzaron a moverse.— Hicieron bastante, aunque con eso quiero decir a nada.— soltó antes de salir totalmente.

Después de eso, los gemelos se quedaron solos, y no tardaron en hacerse ideas erróneas de todo lo de hace un momento.

Al día siguiente, Amane y Tsubaki decidieron no tardarse demasiado a la hora de desayunar y salir de casa, llegando más que desaliñados y con los rostros marcados de una noche sin dormir a la escuela. Aoi, quien se encontraba en la entrada con una pequeña sonrisa hasta ese momento, les miró con sorpresa al verlos en la zona de las zapatillas algo dormidos, por lo que pregunto por su bienestar, a lo que ninguno respondió, dejando otra vez a Akane muy preocupada. Nanamine, quien acababa de llegar a la escuela, encontró la misma escena que la oji amatista, por lo que hizo el intercambio de zapatos rápidamente y pronto se acercó a su novia, quien se dejó caer hacia adelante al verla. Está misma al verla, tampoco quiso preguntar mucho por su estado, pues supuso que su hermano Tsukasa tenía todo que ver.

Tanto la peli morada como la de cabellos verdes decidieron que era mejor irse de allí y, por tanto, ayudaron a los hermanos que estaban medio sonámbulos del sueño a caminar, llevándolos a duras penas hacia las escaleras y luego al aula correspondiente de cada par. En cuanto Aoi había dejado a Amane en su asiento, escucho la puerta corrediza de la entrada y por ella, algunas chicas empezaron a soltar chillidos de terror y comenzaron a preguntar por el bienestar de la recién llegada. La de ojos morados trato de no darle importancia en ese momento, porque su amigo oji ámbar necesitaba su apoyo, más la voz y la mención de su mejor amiga hizo que todo cambiará y ambos jóvenes voltearon a verla.