solo para mí (Yewook)

parte 3

(me gustaría que comentaran que tal les pareció el capítulo y no solo votar, porque así siento que lo leyeron y no solo votaron por votar)

Después del desayuno del pequeño humano, Yesung lo llevo a conocer su gran castillo, el pequeño miraba todo con gran impresión, era la primera vez que miraba una casa gigante, le estaba encantando.

Yesung miraba con ternura a ese pequeño humano tan inocente, que era tan feliz sin preocupaciones, ni nada, emanaba una luz de tanta esperanza.

– yeyé tu casa es muy grande me gusta.

– si, está muy grande para que tú puedas jugar todo lo que quieras - Yesung le dedicaba una sonrisa con demasiado cariño.

– siiii - dijo emocionado el pequeño.

Paso el día, en la hora del almuerzo el pequeño Wookie platicaba con yeye un poco sobre su corta vida mientras vivía con sus padres, asta incluso de sus gustos.

Yesung se dió cuenta que el pequeño no ah vivido ninguna experiencia mala, bueno solo la muerte de sus padres, pero de ahí en fuera nada, Wookie le dijo el amor que sus padres le tenían, y del amor que le tenían a él.

Hubiera deseado que con sus padres fuera diferente.

– ¿Y tus papás yeyé? - esa pregunto congelo un poco a Yesung ya que no quería hablar de eso.

– bueno, ellos... Murieron también pequeño - dijo con nostalgia.

El pequeño Wookie puso su pequeña mano en su mejilla, eso le transmitió mucha paz a Jong woon.

– no te preocupes yeye, ellos han de estar cuidándote desde allá del cielo, así como los míos, ellos de seguro te amaron, junto a tu hermano - "pobre niño inocente", pensó yesung  si supiera como eran realmente sus padres no diría eso, pero no le diría nada, ya que sentía que el pequeño Ryeowook no entendería fácilmente sobre eso.

Todo el día Yesung estuvo jugando con el pequeño Wookie, eran juegos tontos pero que hacían feliz al pequeño, llegó la hora del baño, está vez le dió una ducha rápida y una pequeña cena que consistía en un vaso de leche y unas galletas que preparo Nina.

– yeyé - hablo Ryeowook.

– dime pequeño.

– ¿Dónde dormiré? - pregunto.

– ¿Quieres una habitación para ti solito? - se le había olvidado ese pequeño detalle a Yeye, si por él fuera lo tendría en su habitación, pero están seguro que el niño aún no sentía tanta confianza como para dormí con él.

– sii - dijo emocionado.

– Nina por favor prepara una habitación a lado mío - le ordenó Yesung.

Nina asintió y fue hacer lo que le ordenó Yesung.

Yesung ayudo a cepillar los pequeños dientes de su niño, ahí noto con más detalles sus labios, se miraban tan delgados finos y suaves, por alguna extraña razón quería besarlo, sacudió su cabeza, él no era un maldito pedófilo.

– listo pequeño, tu habitación ya debe estar lista así que ven vamos.

Yesung le secó sus labios con una pequeña toalla, y luego fueron a la nueva habitación del pequeño.

El niño quedó fascinado, vio unos cuantos peluches de jirafa adornando la cama y unas sábanas de color azul zafiro, para darle un toque un infantil.

– luego pondremos la habitación a tu gusto pequeño, ahora es hora de dormir así que por favor, me encargaré de eso.