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Por el contrario de lo que pensaban sobre Jungkook, sus gustos y en especial la relación con su familia; su vínculo era muy bueno. De hecho muchos solían sorprenderse cuando entraban al cuarto de Jeon.
Esperarían el típico cuarto de "fuck boy" de las películas, pero en cambio, todo estaba minuciosamente organizado y limpio. Aunque muy faltante de color; todo era en escalas del negro, blanco y beige.

Acostado en su cama, sin saber que hacer luego de aquella intensa conversación, y con un libro a punto de terminar; su mente debatía en qué debía hacer primero.

El libro que Park había seleccionado en aquella librería lo había llenado de dudas y miedos. En especial miedos. 

"Hecha de estrellas" era una historia con una narración simple, nada muy compleja; pero con una trama que impactaba a todos de formas distintas.

Sin duda alguna Jeon no quería aquello para su hermana, el miedo que ella estuviera lejos de su protección le causaba incertidumbre. Desde que la había conocido, cuando apenas rozaban los cinco años de edad, sabía que daría cualquier cosa por protegerla.

—Oye, idiota. Dejame de verme como si mañana fuera a morir, te estoy hablando.— Dahyun estaba para en el marco de la habitación del castaño, esperando algo enojada por su respuesta.

—¿Qué?

—Te dije que Taehyung está abajo, esperando esperando en la puerta. ¿Vas a bajar o lo dejas cagarse de frío afuera?— realmente estaba muy sorprendida por su extraña respuesta. Él nunca había rechazado ninguna de las visitas de Kim.
Aunque para Dahyun era un alivio, ya no tendría que hacer oídos sordos a todo lo que traía una visita del mayor a su hermano.

—Decile que se vaya, no quiero verlo ahora.— se giró sobre su cama, dándole la espalda a su hermana y viendo por la ventana; podía ver claramente a Kim parado en la entrada de la casa.

Y en específico la expresión de éste al ver como su hermana no le dejaba entrar. Pero aún sin ánimos de rendirse, Taehyung se alejó unos cuantos metros de la casa para poder a la ventana que claramente daba al cuarto de Jungkook.

—¡VAMOS JUNGKOOK! DEJAME ENTRAR.

Si hubiese estado de ánimos muy seguramente se hubiera burlado de la patética escena que había montado en la calle; pero solo se limitó a abrir la ventana y enseñarle claramente su dedo del medio, mientras sonreía cínicamente.

Sin duda al día siguiente, Jungkook y el chico que gritaba en la calle serían la nueva noticia que llevaban las vecinas a los almacenes y kioscos. Y si no se enteraba por su hermana antes, su madre no tardaría en preguntarle.

"Váyanse todos al carajo, el imbécil de Taehyung, el idiota de Yoongi, Park, su estúpido débil caracter y el gusto de mierda que tiene para los libros"

[...]

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Unknown Letter [Kookmin AU] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora