Acudo al cuarto de mi hijo para ver qué le sucede, pues despertó en la madrugada con gritos ahogados mientras se escuchaban golpes en su habitación. Voy a su encentro y lo veo temblando en su cama, "Hijo, ¿Qué te sucede?" a lo que él responde "¡Papá, hay alguien en mi armario!" con cierta gracia, voy hasta el armario para cumplir su capricho, lo abro y, para mi horrida sorpresa, mi hijo también está en él, temblando mientras balbucea "¡Papá, hay algo raro en mi cama!"