EPÍLOGO
— ¿Te encuentras bien? —me pregunto Alinee mientras me colocaba el velo.
—Sí…—conteste, no muy convencida.
—Ah, estas asustada.
— ¿Qué? No, por supuesto que no.
—Claro —se colocó de cuclillas delante de mi— Es más que normal estar nerviosa, Vicky, después de todo, solo te casas una vez.
—Sí, pero…—suspiré— ¿y si no soy buena esposa?
—Jin Ki sabrá que hacer.
— ¿Y si no sabe?
—Tú lo sabrás.
— ¿Y si ninguno lo sabe?
—Lo sabrán.
—A veces eres muy optimista.
—Gracias —me sonrío— ahora solo falta el ramo.
—Sí —dije un poco más calmada.
—Saldrá bien, Vicky.
—Sí, eso espero.Entonces sí, me encontraba arreglándome para mi boda, ya era su esposa, por la ley, pero ahora venía la iglesia y eso me aterraba, porque era “hasta que la muerte los separe” Y es un hermoso pensamiento, pero ¿iba a ser alguien que valiera la pena?
— ¡VICKY! —escuche el grito de Hye Mi.
— ¿Sí?Me voltee para mirarla, estaba vestida del mismo color que Alinee y EunSung, crema, por alguna extraña razón, no tuve elección en eso.
—Está nerviosa —aclaro Alinee.
—Kim Vicky, ¿nerviosa? —Pregunto con sarcasmo EunSung— ¿Seguras que hablamos de Kim Vicky?
—Ja, Ja, Ja —dije y ella me sonrío.
—Tranquila, no es cosa del otro mundo.
— ¿Y si me caigo en plena entrada?
—Eso no pasara —confirmo Hye Mi.
— ¿Y si me caigo encima del pastel?
—Onew lo evitara —dijeron las tres al unisonó.
— ¿No podemos atrasar la boda?
—Para tu mala suerte todos los invitados ya están en la iglesia y pronto iniciara la ceremonia.
—Hubiera preferido que no aceptaran nuestra relación, para así huir y casarnos en secreto.
—Eso solo pasa en las películas, querida —dijo EunSung.
—Ya no seas payasa y regresa a la Tierra que tu boda comenzara en 20 minutos.
—dijo sonriendo HyeMi y me entrego el ramo.Tocaron la puerta y pronto entro mi padre.
— ¿Lista? —me preguntó sonriente.
—No —conteste sincera.
—Está nerviosa —volvió a aclarar Alinee.
—Oh ¿puedo hablar con ella? —pregunto y las chicas asintieron y salieron.Mi papá camino hasta sentarse a mi lado, lo miré y me sonrío.
— ¿Lista?
—No —volví a responder y el rio— ¿tú?
— ¿Qué si estoy listo para dejar ir a mi única hija? Por supuesto —guardo silencio por uno segundos, pero volvió a hablar— que no —me reí un poco— pero un día iba a llegar y bueno, ahora me arrepiento de nunca haberme preparado.
—Gracias, por venir a entregarme.
—Eres mi hija, además pensé que no me lo pedirías.
—Eres mi padre.
—Gracias —le sonreí— por cierto —saco una cajita y la abrió, dentro se encontraba un hermoso collar de oro —de parte de mi abuela —sonrío— y de todos los ante pasados.Me hice el cabello de lado y él me coloco el collar. Tocaron la puerta y se asomo Alinee.
—Es hora.
Suspiré y junte todo el valor que tenía en ese momento.
[…]
Cuando llegamos a la puerta, Onew ya había entrado, y seguían sus padres, después mi madre con Jonghyun, los padrinos y pronto las damas de la novia y era mi turno.
—Es hora —dijo mi padre, pero no me moví— ¿Vicky?
Suspiré.
—Creo que no podre —dije mordiéndome el labio inferior y el me sonrío.
—Tu madre estaba igual que tú, pensé que me dejaría plantado, pero cuando entro y la música empezó, me sentí muy feliz, de hecho, el hombre más feliz del mundo.