Capítulo 28 -AMOR-

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Capítulo 28
—AMOR—

—Buenos días —dije cuando Eun Sung llego a mi departamento, no se notaba muy bien.
— ¿Cuánto tiempo debemos quedarnos más? —pregunto mientras entraba y caminaba hasta el sofá.
—Hasta ahora no tenías prisa de irte.
—Debo irme. —tenía su rostro cubierto por sus manos.
— ¿Qué paso? —pregunte mientras me sentaba a su lado.
—Solo…solo no puedo quedarme más tiempo, ¿no te ha llamado tu papá?
—Me llamo unos días.
— ¿Qué te dijo? —me miró fijamente.
—Dime que es lo que pasa y te lo diré.

Suspiró, bajo la mirada.

—Me gusta alguien —me sorprendí pero sonreí, desde Eunhyuk no había dicho esas palabras.
— ¿De verdad? —Pregunté emocionado, ella me miro y su mirada expresaba dolor— Y es imposible…—ella asintió— ¿Quién es? Tal vez pueda ayudarte.
—Lo dudo —suspiro.
—Vamos, dime.
—Onew si te digo, harás lo imposible por hacer algo.
—Prometo que no —dije levantando la mano derecha.
— ¿Lo prometes?
—Me duele tu desconfianza.
—Es que él, él no es alguien cualquiera.
— ¿A no? Bueno, no lo sabré hasta que me lo digas.
—Bien —tomo airé— es Sebastián. —Dijo mientras cerraba los ojos, deje de sonreír— con el tiempo me empezó a gustar,  y los últimos días antes de regresar de viaje, él se portó muy distinto y…—suspiro— no deseo quedarme más tiempo, Onew.
—Eun Sung…
—Tal vez tú puedas ver a tu amada ir a los brazos de alguien más, pero yo no, yo no puedo en lo más mínimo.
— ¿De verdad deseas irte? —la miré fijamente.
—Sí.

| Cha Eun Sung |

— ¿De verdad deseas irte? —me pregunto y aun con el nudo en mi garganta pude responder bien.
—Sí.
—Bien —se estiro— estamos a Jueves ¿puedes esperar hasta el Sábado?
—Sí, gracias.
—Sabes que eres mi hermana, no puedo verte así y…lo siento.
—Está bien.

Regrese sola a la casa de Wickham, Onew insistió en traerme pero de verdad no quería. Cuando baje del taxi para entrar, Sebastián llego.

Ingrese rápido para no tener que hablarle pero entonces sentí ser sujetada del brazo y pronto mis manos sintieron un pecho fuerte y el olor a vino, estaba algo borracho.

— ¿Qué fue lo de esta mañana? —pregunto él.
— ¿Qué cosa? —no quería verlo.
— ¿Por qué estabas tan cariñosa con Frank? —Frank era el instructor de canto, era un buen amigo.
— ¿Cariñosa? —lo miré seria, sus ojos verdes se clavaron en mí y sentí miedo…miedo de no poder controlarme.
—Sí, ¿por qué?
—No debes pedirme explicaciones de mi comportamiento, Wickham.
—Lo sé —sacudió la cabeza y clavo su mirada en la mía— pero lo sigo haciendo.
—Suéltame…—le pedí pero no lo hizo— Tienes a Vicky —le recordé, pero su expresión no cambio.
—Lo sé —contesto— pero ¿qué debo hacer? Creo que te quiero a ti —y deje de respirar.
—Sebastián suéltame, no estás en tus cinco sentidos.
—Tal vez no, pero sé que lo que digo ahora no es mentira. —tomo mi mentón y empezó a acercarse, sentí su respiración muy cerca…
—Sebastián…—quería que sonara enojado, pero solo me salió un susurro y sentí sus labios rozar los míos.
—Por favor —me pidió y me deje que sus labios se juntaran con los míos.

Sabía a vino, pero era dulce y suave, no era como los besos devoradores que siempre recibía, no, este era diferente, este me hacía sentir protegida y amada.

—Aléjate —me dijo una voz de mi cabeza— Ya la lastimaste una vez, ya no.

Me aleje de golpe de Sebastián el cual me miro confundido.

Ella & YoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora