Parte 11

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Amaya estaba incomoda su padre la habia dejado, así no mas, pero tenia razón no era responsabilidad de sus padres sino del Supremo por marcarla como su compañera, Duncan no sabia que hacer estaba de un lugar a otro, pasando sus manos por su cabello oscuro, miraba de reojo a la loba y mas aumentaba su molestia.

Gruñia, y volvia a gruñir

_No es tan malo, yo quiero Amaya Dunca es nuestra compañera, porque te niegas a nuestra madre luna

_Sabes lo que pasara, no voy a perderla

_La perderemos por tu actitud, terca, mirarla no sabe que hacer contigo

Amaya quiso levantarse,. Pero se volvió a quedar sentada cuando Duncan se quedó mirandola, no sabe cuanto tiempo estuvo asi, pero necesitaba saber si podría almenos poner una barrera en la cama ya que solo habia una.

_Duncan, creo que debemos hablar

El lobo se detuvo, mirándola tenia la cara afligida haciéndolo sentir mas mal de lo que estaba, quería Amaya demasiado pero no sbia como manejar este barco

_por favor, se que estas molesto, pero mi padre fue claro no quiere que me regrese a casa y no tengo a donde ir_dijo triste_ se que para ti es molesto pero no fue mi culpa, ademas casi golpeas a mi padre Duncan

Ducan recargo sus manos en la pared dandole la espalda, procesando todo esto, ahora tenía una niña de quien debía responder sobre todo era su compañera y debia cargar con ella por no controlarme, no le basto marcara si no hacerla suya.

No recuerda cuando fue la última vez que estuvo con una mujer pero sabía que pasó centenar de años. Pero Amaya su fresco olor frutal Granada, su esencia lo erizaba, esa forma de mover sus labios al decir su nombre

_Duncan

_Ya te escuche Amaya, no es necesario que me lo repitas de acuerdo_ dijo molesto _es solo que tu padre me dejo algo incómodo con esta situación, te vuelvo a pedir disculpas no sabia que lo era, soy un idiota tienen los mismos ojos.

_ ¿Mi padre? solo hizo lo que creía era correcto Duncan , pero esa actitud que tomas solo me afecta, por favor tratemos de llevarnos mejor hazlo por mi

_No te volveré a tocar amaya, no puedo lo siento

Esas palabras fueron dolorosas para la loba, que habia malo en ella lo amaba, pero ahora era como si fuera la culpable de todo esto cuando el fue que la tomo.

_no fue correcto, pero las cosas estan hechas, dormirás en la cama, yo tratare de buscar un lugar entendido, ahora duerme mañana será otro dia

_ Duncan

_Saldre te vere después

Amaya lo vio partir, se fue hasta la cama quedándose sentada esperando que pronto regresara, pero tenía tristeza, una amargura en su corazón no sabia cuanto iba a aguantar, pero ahora creyo que eso los uniria al estar juntos pero solo los alejaba, porque se negaba a su destino.

_Eres un tonto lobo Duncan

Las lágrimas salieron, pero estaba segura que rencaera ese corzon dolido quie lelva mcuho tiempo solo.

Se quedo dormida, pero el no regreso, ni al dia siguiente, entristeció no supo que hacer en ese lugar, camino hasta los manantiales, Duncan no dejaba que nadie los tocara, según cuenta la leyenda la diosa luna venia cada luna blanca bañándose después de mucho tiempo, extrañaba aquel hombre con quien comparito su vida pero por desgracia de la vida el habia muerto y nadie volvió a verla, pero su sangre se fue expandiendo en muchos hijos.

Metio su dedo el agua tan cristalina que hizo un remolino al tocarlo, su piel se erizo, cambiando sus ojos aún blanco movio sus labios susurrando miles de palabras en segundos, fue elevada sin tocar el agua dentro de su vientre entro una pequeña luz, Duncan acababa de llegar cuando vio Amaya flotando arriba del manantial que corrió hacia ella

_Amaya!!!!

El cuerpo de amaya cayo con fuerza , despertó asustada, mientras Duncan la sacaba del agua, se aferró al cuerpo del lobo tosiendo

_Estas bien Amaya, responde _ tomo su rostro mirándola

_creo que si es solo que... _no recordaba nada_ que me paso Duncan

_Caíste , estas segura que no recuerdas nada

Ella volvió a negar, después de ese suceso, el lobo le prohibió tocar ni acercaese a las aguas era una orden que demando el lobo. Ella solo asintió que más podria hacer ente lugar

Los dias pasaron se fueron haciendo semanas, la relación entre ellos apenas logran tener una comunicación, Amaya se frustraba tratando de seducirlo pero no lograba que es hombre era duro en caer a sus encantos, sobre su familia, los visitaba siempre y cuando el supremo la llevaba e iba por ella de nuevo, no tenia mucha realcion con su ahora familia política sobre todo con el padre de Amaya.

Elais la miraba que no era feliz pero lo trataba de disimular muy a su pesar, si ese hombre seguía asi, el se encargria de golpearlo hasta que entiende en no lastimar a su hija,

_No te vez feliz Amaya _dijo su madre al verla limpiando unos platos.

Le encantaba que su hija viniera casi todos los días, era como si no quisiera estar en su nuevo hogar

_Lo soy mama,. Que te hace pensar en decirmelo_ trato de sonreír

_No tienes ese brillo como hace meses, cuando llegaste

Ella hizo una mueca la conocían tan bien, no podía engañar, era su madre y tenia ganas de llorar estos meses se limitó a solo sonreír, sabia que su corazón estab llenó de tristeza y de lagrimas que había retinido odiaba aquella sensación de nudo en su garganta.

_Mama, Lo amo pero el .. no me toca

La loba se desahogo con su madre abriéndose como era su vida en esos meses viviendo con el supremo, pensó que podría curar su corazón pero no podia más, a hecho de todo en tratar de acercarse pero el la aleja, y aunque no queria reconocer estaba llegando a su limite, pero no lo dejaría solo ya no insistirá, duele y mucho.

_Te darás por vencida, donde esta mi hija que a todo mundo lo alienta, no amor lucha pero si ese hombre sigue en ese plan no hay como un poco de motivación ya sabes

_No estoy entndido

_Mi amor ven sentémonos y harás esto....

Amaya se despido de su madre, no alcanzo a ver a su padre aun no llegaba y sus hermanos siempre estaban afuera, vio recargado a Duncan sobre un árbol, fue hasta el tan decidida que no le dio tiempo al lobo de reacciónar cuando lo tomo el rostro besandolo

No fue un beso tierno fue un beso necesitado de sus caricias, el trato de apartarla pero su lobo internó tomo el control, lo excito tanto aparto su rostro tenía ese brillo que deseaba tenerla, la llevo de la mano hasta su nuevo hogar , solo unos pasos bastaron ganando el deseo en no poder mas tomándola ahi entre caricias y besos sometiendola sobre la pared rocosa.

Amaya soltó un gemido, enredo sus piernas en su cintura, los deseaba desde hace tiempo.

Mordio su cuello, sabornado su esencia, todo este tiempo tratando de no tocarla , ahí estaba el buscando su tacto en su piel logrando que la loba lo poseyera, , monto al lobo como dueña y señora de su cuerpo y alma.

_Mi dulce Amaya. 

Destinados El alfa supremo libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora