Saliendo de su hogar, el sol se estaba ocultando, las sombras de ambos daban la percepción de atemporalidad, a medio jardín México se detuvo dándole la espalda, ninguno habló, México hizo un recuento de sus cosas, las pocas que quedaban estaban en el carro, todo estaba listo para partir, tal vez no dijeron todo lo que hubieran deseado, pero ya estaba hecho, en una hora volvería a casa, esta vez no regresaría.
Sentía las dudas hacer ruido en su mente, sin darse cuenta se encorvo sujetando sus manos, no tenía claro que hacer ahora, ¿debería subir al auto y solo marcharse?, ¿debería despedirse?, ¿debería al menos verlo a la cara?, ¿qué estaba esperando?, no sabría cuánto hubiera durado pensando en cómo actuar si no hubieran sido por el claxon del auto, levanto la vista para tomar una postura recta mientras soltaba un suspiro y apretaba los labios, dio un paso adelante.
-México-
Solo sintió como sujetaba su brazo, parpadeó un par de veces, cuando USA conecto sus manos se percató de como su corazón se aceleraba y un nudo se formaba en su estómago, el tacto suave hizo que girara su cuerpo, estando frente a frente separó sus manos, extendiéndolas a sus costados y apretándolas, después de hacer esto un par de veces lo miro a los ojos.
-Ten un buen viaje-
Asintió ligeramente, humedeciendo sus labios, cuando noto que USA miraba sus labios no pudo evitar sonreír ligeramente, ¿alguna vez cambiaria?, con esa pregunta aparto la vista y se cruzó de brazos encorvándose un poco sobre su propio cuerpo.
-Ten cuidado ¿sí?- se miraron a los ojos. -No quieres tener que volver a verme tan pronto-
-Por supuesto- susurro mirando a otro lado.
-Bien... será mejor que me vaya-
Sentían la necesidad de huir, ya sabía qué hacer, no podía seguir con esto, así que aparto la vista, se enderezó con intención de por fin marcharse. Pero sintió como USA tomaba su mejilla, no puedo evitar pensar que era extraño ese contacto tan ligero, tenía la percepción de que podría romperse en cualquier momento, tal vez desaparecer, y tal vez comenzaba a desearlo.
-México... yo...-
Evitaba el contacto visual, abría y cerraba la boca, parecía que era importante, no sabría decir cuando lo había visto tan... ¿nervioso?, era tan extraño, estaban en la mitad de una "guerra" y USA estaba más nervioso por decirle algo que por todos los desastres que estaban provocando, soltó una pequeña risa atrayendo la mirada del estadounidense, quien solo cerro los ojos agachando un poco la cabeza, se veía tan frustrado, aprovecho los pocos minutos que le quedaban con él para observar sus facciones, se sintió mal, era verdad que este era el final, pero no podía evitar sentirse mal por él, se veía tan tenso, nervioso, era raro, hacía que se sintiera culpable, estaba tan cerca, pero esa era la última vez, ese era el último momento como ese, sintió como acariciaba su mejilla, estaba fuera de su elemento, debía irse lo más pronto posible, no se arrepentiría, por el bien de ambos, era lo mejor.
Tomo la mano en su mejilla dándole un ligero apretón para después apartarla. Como si el conductor lo supiera, sonó el claxon de nuevo.
-Me tengo que ir-
Pero no dejo que se alejara, USA tomo sus hombros para después de un corto contacto visual atraer su cuerpo, formo un abrazo no compartido tomando a México por sorpresa, siguió la acción y correspondió ese último adiós, rodeo el torso contrario y recargo su cara en su hombro, sintió como USA apretaba su agarre, sus manos en sus hombros bajaron a su espalda sintiendo la suave tela para después hundir su cara en su cuello, cuando sintió su respiración no puedo evitar un escalofrió, USA apretó la tela haciendo que estuvieran lo más cerca posible.
-México lo siento- suspiro en su cuello -y-yo lo lamento-
Solo sintió como sus ojos se humedecían con rapidez y su garganta se cerraba, cerró los ojos con fuerza para evitar que las lágrimas salieran y apretó el torso ajeno, después de tragar con fuerza por fin hablo.
-Yo también lo lamento-
-Solo... solo quería que lo supieras ¿sí?-
-Está bien- volvió a cerrar los ojos.
-Lamento lo que hice, y-yo- tragó con fuerza -También lo que no hice-
-Gracias-
Sonrió con nostalgia para sus adentros, lo sujeto con fuerza, aspiro su colonia una última vez, estuvieron así por un tiempo, cuando dejo de sentir que si lo volvía a ver a los ojos lloraría se separó para dedicarle una sonrisa, acaricio su rostro con ambas manos y USA acaricio sus manos, no dijo nada y acerco sus rostros, cuando cerró los ojos se dieron un beso, fue un simple contacto, pero no pudo evitar sentir alivio cuando se separaron, se dedicaron una última sonrisa, se alejó y se dirigió al carro, cuando entro ignoro al desesperado chofer para mirar por la ventana, después de dedicarse una última sonrisa le hizo una señal al chofer para que arrancara. Cuando dirigió su vista al frente noto unas cuantas estrellas en el cielo, la luna nueva le permitía ver con más claridad el cielo nocturno, cerró los ojos para relajarse en su asiento, en unas horas estaría en casa y después de todo, sería un nuevo día.
–
No lo mencioné antes pero si ahora, el título es un juego de palabras, en lugar de usar lo de “Tu y yo” usé más bien un “Tu y tuyo o de ti” para dar un sentido de propiedad a la relación que no es correcto, pero fue lo que intenté aquí.
862 palabras. Pues eso es todo que curioso y que emoción. Gracias por leer. Y tengo una pregunta ¿Cómo se imaginaron a México? Tengo curiosidad porque no sé qué es.
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You and Yours
Hayran KurguSu matrimonio es un sentimiento tierno de desesperación, como una canción que suena dulce hasta que prestas atención a la letra y te das cuenta de lo que realmente es.