El rey vampiro - DxD

Cap 75:.....

"Hmmm...parece que Vlad ha estado muy inactivo últimamente...Me pregunto... ¿Cuánto ha crecido desde que deje de verlo?" En medio de un castillo totalmente destruido y sentado en el trono, estaba una mujer de aspecto inigualable mientras su cabello brillante bailaba pero....había algo que haría cualquiera que la viera estuviera lejos de encantando, y eso era su obsesionada cara y sus ojos brillantes con rastros de locura.

Mirena había dejado de estar al tanto de Vlad, para poder planificar más el futuro del vampiro sin saber que el mismo vampiro estaba teniendo cada vez más planes en contra de la Diosa.

"..." Frente a Mirena, estaba un hombre de traje con una cara sin expresión pero cuyos ojos brillaban con algo de desprecio hacia la diosa, el hombre tenía los ojos negros, bastante raro para su raza, pero su rostro era bastante conocido para Cao Cao....el hombre de traje negro era Saito, el vampiro que trabajaba junto a Khaos Brigade y a la vez un..."subordinado"... de Mirena.

"Sera tan emocionante volver a encontrarme con él....Fufufufufu....No te preocupes mi Vlad, estoy preparando más juguetes para que sigas creciendo" Mirena empezó a reírse como una demente, mientras ni siquiera ponía en sus ojos al vampiro de ojos negros; en la mente de la Diosa solo estaban pensamientos de Vlad y más Vlad.

'....Mierda....a pesar de que lo sabía desde un inicio...Solo somos objetos que serán usados para enfrentar al nuevo Rey de los Vampiros' Los puños de Saito se cerraron con fuerza pero junto a los pensamientos del vampiro, los ojos de Mirena se fijaron en Saito y una enorme fuerza empezó a presionar al vampiro.

"Deberías estar feliz de poder servir a mi plan...De no ser por tu habilidad....hace bastante tiempo que hubiese eliminado a toda tu gente....Saito" Mirena empezó a flotar por la habitación, mientras miraba por los vidrios rotos del castillo destruido, varios seres estaban caminando entre casas destrozadas y antiguas....todos vampiros pero que compartían un rasgo característico de Saito, no tenían los característicos ojos rojos sino que tenían ojos negros.

"Otra vez...me arrepiento del día que decidí escapar a este lugar...De no haberte conocido" Saito poco a poco estaba cediendo bajo la presión de Mirena pero, lo sorpréndete era que incluso Indra o Shiva habrían terminado destruidos por el nivel de fuerza que liberaba Mirena.

"De no haberme conocido, toda la gente que te siguió durante tu traición contra tu propio pueblo...todo tu leal ejército e incluso tu pequeña hija, estarían muertos...No lo olvides....solo están vivos por una única razón y puedo matarlos a todos" Mirena obviamente seguían conteniéndose bastante, ella no podía perder a su único agente que podía presionar a Vlad para que este evolucionara más.

"..." Saito termino cayendo contra el piso, mientras sus encías sangraban por la fuerza con la que el vampiro cerraba su boca y soportaba la humillación de Mirena.

"Ahora....sigue comportándote como un buen juguete y sigue enfrentando a Vlad....para que mi querido vampiro pueda seguir creciendo" Mirena se dio la vuelta con una sonrisa en su rostro, pensando en todo lo que iba a disfrutar jugando con Vlad y haciéndolo crecer lo suficiente para poder reclamarlo por la eternidad.

Ella estuvo tan perdida en sus pensamientos, pero la cara de alegría de Mirena se rompió al notar la interrupción de Saito....porque unas cadenas empezaron a bailar por todo el castillo, Mirena volteo a mirar a Saito y vio al vampiro con un dedo levantando, de donde se liberaban las cadenas que amenazaban a Mirena.

"¿Estas yendo en serio? No seas estúpido Saito....no tienes ninguna oportunidad contra mi....Eres fuerte, incluso más que esos autoproclamados dioses más fuertes....Pero conoce tu verdadero lugar" Mirena puso una expresión enojada y con un movimiento de su mano, todas las cadenas se detuvieron en su posición y con otro movimiento de su mano, todo el cuerpo de Saito se levantó en el aire.