1.2:Morder

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Caminaba por el largo pasillo y todos me miraban mientras avanzaba aula por aula de la universidad en el horario anterior, el de la mañana.

Había pasado una semana hasta formalizar el cambio, y después de muchas reprimendas por las personas de secretaría que señalaron numerosas veces que sería el último cambio que me permitirían. Lo conseguí.

Yoongi estaba en la puerta del aula mirando su móvil hasta que notó mi mirada y sonrió.

Si soy sincero, no sabía de que forma hablarlo, puesto que desde ese día en el pub de micrófono abierto casi no hablábamos.

Toda esa noche la tenía borrosa, y no sabía cómo había terminado. Y lo cierto es que tampoco quería saberlo.

Tia Sun me había regañado demasiado por haber llegado al día siguiente y no haber avisado al respecto. Tan enojada estaba que no me habló en tres días.

-¿Por qué me miran?-Dije y Yoongi parpadeó mirando a los lados con el ceño fruncido.

-Porque estas guapo. -Se hundió de hombros.

-Que tontería...-Negué y me senté en mi anterior sitio.

Cuando llegó Namjoon, Yoongi esperó un saludo, pero al vernos a ambos apretó la mandíbula y se sentó un puesto después.

-¿Me vas a ignorar?-Preguntó Yoongi.

-Hasta que no pares con lo que estás haciendo. Sí. -Dijo de forma seria mientras abría los libros.

Intentaba concentrarme en la asignatura pero me parecía aburrida, mucho tiempo perdido a propósito.

Bajé la vista a mis manos y miré de refilón las de Yoongi.

Eran largas y venosas. Me recordaron a las manos de un vecino que tenía antes de mudarme a Seúl, el señor de la floristería. No recuerdo su nombre.

Pero a menudo lo veía arreglar flores en su jardín, y a veces ayudaba a mi madre a montar muebles. Una vez incluso me dio una piruleta.

-¿En qué piensas?

-En que esta clase me va a hacer dormir.

El tono no debió ser el adecuado porque el profesor me pidió que saliera de su clase. Y aún quedaba otra hora de la misma.

La idea de ir a la biblioteca me hizo recordar a lo ocurrido con Yoongi. Así que opté por caminar alrededor del campus sin un objetivo claro, cuando vi un árbol frondoso con una increíble sombra.

Terminé sentado bajo aquel árbol mientras leía mi composición de "Still With You" , ni siquiera la había vuelto a cantar después de haberla compuesto la pasada navidad, cuando la canté esa noche, pero la recordaba.

Había cerrado los ojos, cuando noté que Jimin estaba sentado a mi lado. Lo supe porque su pequeña mano apretó la mía.

-¿Qué haces aquí Koo?

⚠️

Abrí los ojos y lo vi, estaba extraño. Con ojeras, pálido y el pelo algo largo, yéndose de su look habitual. Incluso olía mal, JIMIN NUNCA OLÍA MAL.

-¿Por qué me miras así Jk?-Dijo y empezó a salirle garras en las manos, mientras sonreía de una forma que por mucho, parecía maquiavélica.

La gente al rededor pasaba de nosotros.

-¿Es verdad que te da igual si me muero Jeon Jungkook?

Se acercó a mi oído y mordió mi oreja con tanta fuerza que lo empujé y llevé mis manos a esta para ver los hilos de sangre.

Salí corriendo de ahí al ver que le empezaba a salir sangre de los ojos y en lugar de su rostro de ángel, uno desfigurado aparecía.

Corriendo por el campus hasta que llegué a chocar con unas estudiantes y todas estas estaban igual que Jimin. Desfiguradas.

-¿Jungkook?-Vi a Taehyung con una bata blanca.

-Ten cuidado.-Dije y se acercó corriendo a donde estaba yo.

-¿Qué ha pasado?

-No he sido yo. Esta sangre no es mía Taehyung. -Me intenté limpiar en mi ropa.

-No hay sangre Jungkook. ¡No hay nada que ver aquí, largo! -Dijo al grupo de alumnas mientras estas caminaban dando tumbos de lado a lado. -Deberíamos ir a enfermería.

-No por favor. No estoy loco, Taehyung. Tu lo has visto, estaban ahí. Mira la sangre.-Enseñé mis camiseta y su mirada titubeante lo negó. -Eso no es real Jungkook. Deja que te vea mi profesor, es un doctor muy bueno en su campo. Ha venido a dar una conferencia a varias carreras, y podrías hablar con él. No es normal que estes viendo cosas que no son reales.

-Pero son reales...

Me llevó de la muñeca a uno de los departamentos de medicina, y estaba ahí de pie un señor que parecía medir tres metros y Jimin.

-No, tú de nuevo no. Taehyung, Jimin estaba cubierto de sangre, te lo juro. Él me hizo esto.-Dije enseñándole mi oreja a lo que los tres pares de ojos me miraron inexpresivos. -No me creen...nadie me cree...¡Pues...-Iba a marcharme, estaba tan cerca de la puerta cuando su voz, me hizo quedarme.

-Quédate, yo te creo. Pero eso no es real Jungkook.-Dijo Jimin caminando a mi lado.

Lo tomé del cuello y lo examiné.

-¡Estudiante! ¡Deje al chico! -Grito el profesor.

-No me hará nada Profesor...-Dijo Jimin mientras boqueaba por aire.-Koo jamás me haría daño.

Lo solté y el cayó al suelo.

Había salido corriendo y me choqué con Yoongi.

-Tienes mala cara ¿qué te ocurre?

-Quiero irme a casa. M-me voy...

-Nos vamos.-Dijo y agarró mi mano llevándome con él.

-¡Jungkook, espera por favor!-Escuché a Jimin que corría para alcanzarme.

-¿Es Jimin quien me habla?-Pregunté a Yoongi quien regresó a mirar.

-No hay nadie Jungkook. -Creo verle sonreír.

-Yoongi ¿qué es real?

Eres Extraño Jungkook | Kookmin Kookgi (Edición 2023)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora