No la has olvidado

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MERYL'S POV

La chica miraba a su alrededor por si alguien estaba despierto, y, con su capa y su rostro emmascarado de oscuro negro, salía de casa. Corría a los establos, y se montaba en su caballo, negro cómo la noche, con su larga crinera y su brillante lomo, y salían trotando de los jardines de la mansión de Woodley. Clea Woodley y su caballo, conocido cómo "Medianoche" galopaban desde la casa de ella hasta la colina. Estaba amaneciendo cuando llegaban a la cima, dónde ella dejaba reposar al animal y esperaba la llegada de un apuesto chico, que llegaba con un caballo dorado cómo el sol, y con una capa roja cómo el vino. Sus ojos, azules cómo el océano, eran intimidantes, y fríos, y su corta melena de rizos oscuros brillaba al amanecer. El chico, llamado "Príncipe", desmontaba de su caballo y se acercaba a la hermosa hija de los Duques de Woodley, la preciosa Clea.

Y le besaba la mano. La muchacha se sonrojaba ligeramente, y dejaba que él le quitara la capucha, para poder observarle el rostro. Ella tenía el pelo más oscuro que la noche, largo, hasta la cintura, con ondas, y los ojos del color del alba, románticos. Tenía los labios rojos cómo las cerezas, y la piel pálida cómo una luna llena.

Luego, el príncipe Casper...

Cierro el libro, indignada.

- ¿Qué pasa ahora? ¡Llevas casi media hora dándome la lata! ¿Qué quieres?

- Mamá...

- ¡Mamá, mamá y mamá! ¡Sólo hablas de ella!

- Pero...

- Pmf - suspiro, y pongo los ojos en blanco - Dime lo que me tengas que decir de una santa vez.

- Pues... Mamá me ha dicho que te prepares.

- ¿Prepararme para qué? - dejo el libro bajo el cojín cuidadosamente, no antes de besarle el título. Mi hermano me mira curiosamente.

- Para ir a la plaza mayor dónde anunciarán los seleccionados y seleccionadas.

- ¡Mierda! Mierda, mierda, mierda.

- ¡Todo el día maldiciendo! - se oye una voz des del comedor. Mamá. - ¡Venga, prepárate!

- ¡Ya voy, ya voy! - me levanto de un salto. MI hermano empieza a salir de mi habitación (si es que se puede llamar así).

- Pues yo ya me iba...

- ¡Si, vete, pesado! - le digo, con un aire irónico, y él se marcha pitando, cerrando la puerta tras él.

Mamá se enterará que he rellenado los papeles de la Selección solamente si me eligen.

Suspiro y abro el armario.

KRISS' POV

- ¡Todo el día maldiciendo! - le grito des del comedor - ¡Venga, prepárate!

- ¡Ya voy, ya voy! - dice ella des de su habitación. Yo suspiro. Me siento en el sillón, y como un trocito de pan. Jayson se sienta a mi lado, y yo le beso su rubio pelo.

- ¿Emocionado? - sonrío ligeramente. No debería haberle dejado entrar a la Selección, pero sé que le ha pasado algo con una chica. Es lo máximo que puedo hacer. Y duele.

- Nervioso. - responde él, apuntando una hermosa sonrisa. ¡Dios, es idéntico a su padre! ¿Cómo nadie lo confunde con Max... no, el rey, cómo nadie puede hacerlo? La gente no está solamente ciega, sino tonta.

Le beso la mejilla, y él se sonroja.

- ¡Mamá! - ahora se parece a Logan. Dios, cómo lo añoro, a mi hermanito - Ya sé que me quieres mucho pero tampoco hace falta que...

- ¡Falto yo! - Meryl se abalanza sobre nosotros, tirándo a Jayson al suelo, y robándome una carcajada. Ella mueve un poco la cabeza y ayuda a levantar a su hermano.

Yo soy la última en levantarme. Me pongo el jersey de lana azul y les pregunto a mis hijos:

- ¿Vamos?

Jayson asiente tímidamente, y Meryl sólo abre la puerta. Suspiro, y salgo a la calle.

JAYSON'S POV

Camino al lado de mamá, y Meryl al mío, en una punta. Camina de puntillas, cómo si esperara que alguien nos atacara o algo parecido. Sacudo mi cabeza cuando veo a un chico moreno de ojos azules con una bella muchacha agarrada a su cintura.

- ¡Kyleeeee! - Meryl corre hacia él, y los dos se abrazan, soltando carcajadas. Suzanne sonríe un poco, y se acaricia la barriga con ternura, sin darse cuenta. Un sentimiento de culpabilidad me recorre por la espina dorsal.

- Al final vienes. - sonríe mi hermana.

- Sí, al final la madre de mi hijo me ha dejado venir a ver los resultados. - le da un achuchón a Suzanne, quién se acucurra en sus brazos. Lo único que pienso es en la culpablidad que siento.

¿Cómo le pude hacer tanto daño a Kyle, el mejor amigo de mi hermana? Pero... Él aún no lo sabe. Y espero que no lo sepa. En. Su. Vida.

- ¿Es niño o niña?

- Niño. - sonríe Suzanne. Así que nuestro bebé será un chico. Me pregunto qué nombre le van a poner...

- ¿Y ya tenéis nombre? - Meryl insiste, y Suzanne se ríe, sacudiendo la cabeza. ¿Cómo las puedo querer tanto? A la primera, cómo a hermana, pero a la segunda... Desvio mi atención a mi madre.

- ¿Te encuentras bien, mamá? - observo que está jugando con el trozo de tela verde que se lleva a todas partes. Ella me mira, y parece que está en su mundo, cuando sonríe un poco y esconde el trozo de tela dentro de su zapato.

- Claro, ¿por qué no lo iba a estar?

En cuánto lo pregunta se arrepiente de haber hablado. Lo sé. Lo veo. La conozco.

Le ofrezco mi mano pero ella la aparta, cómo si fuera de fuego, cómo si quemara.

- Estoy bien, Jayson. No debes preocuparte por mí, sino por tí mismo. - susurra, y me doy cuenta que nos hemos apartado de Meryl, Kyle y Suzanne.

- Mamá... - algo raro pasa. Me quiere decir algo. ¿Qué es lo que tanto le preocupa? Sus ojos oscuros se fijan en los míos.

- He visto cómo la miras.

- ¿De qué estás hablando?

- No me mientas, Schr- quiero decir, Woodley.

- ¿Qué...? - sigo sin pillar el truco.

- Lo que te he dicho. La manera cómo la miras...

- ¿A quién?

- A Suzanne. - susurra ella - ¿Por qué no me lo dijiste?

- ¿Decirte el qué? - me estoy empezando a cabrear. Y yo nunca me cabreo.

- Que la amas.

- No la amo. Me gustó hace mucho tiempo...

- Pero no la has olvidado. - susurra ella.

Yo no digo nada.

- Y la amas. Con toda tu alma, todo tu ser. Y no la puedes olvidar. Enfermas. Darías hasta tu último aliento por ella. Lo darías todo, si fuera tuya. ¿Me equivoco?

No puedo contestar porque empezamos a oír las seleccionadas. Meryl nos coge de un salto y grita:

- ¡Vamos!

Y la seguimos. Vaya trio que hacemos,

La Selección - Kriss AmbersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora