Sick Hearts [TXT]

07

No pasó tanto tiempo y ya YeonJun se estaba empezando a alterar el doble al no poder hacer nada, intentaba respirar y pensar en algo positivo para ver si así podía tranquilizarse, pero cada vez que volvía a la realidad era algo peor y le daban más ganas de estallar y maldecir todo, pero de nuevo... No podía.

Su respiración sin quererlo cada vez se agitaba más y a veces hasta sentía cómo el aire iba perdiéndose, echó su cabeza hacia atrás inhalando hondo, pero sin embargo nada conseguía, calmarse parecía una misión completamente imposible en ese momento.

"Millones de veces has tenido que aguantarte para no estallar frente a mamá o durante clase ¿Por qué de la nada ahora te da mayor dificultad hacerlo? Luego preguntas por qué siempre te dicen que eres un inservible" pensó YeonJun sin querer hacerlo, aún si intentaba mantenerse positivo para poder conseguir calmarse... Ya era difícil.

Accidentalmente YeonJun pateó la silla haciendo que tambaleara un poco, consiguiendo que Kai reaccionara.

-Ay ¿Qué pasó?

-¡Lo siento! Fue... Sin querer. Oye, ya que hablamos ahora, me parece este es un momento muy personal tuyo, sé que debería ayudarte pero también necesitas tu espacio personal, así que... ¿Por qué no vas a tu cuarto, intentas calmarte más y luego ahí sí seguimos hablando?- "Aunque aquí el que necesita calmarse seriamente soy yo" pensó YeonJun mientras movía su pierna con un poco se fuerza, esperando por una respuesta del menor.

-Vaya, me sorprende la paciencia que puedes llegar a tener, está bien- el chico se levantó sin más y salió de la oficina, YeonJun una vez se aseguró de que ya estaba solo se recostó contra la pared, deslizándose hasta el suelo mediante esta mientras echaba su cabello hacia atrás y sentía sus ojos aguarse, su piel se sentía sudorosa por donde la tocaras y de su boca salían algunos sollozos seguidos de ligeros gritos ahogados.

Se estaba perdiendo a sí mismo, sentía cómo aquel momento tomaba el poder sobre él y perdía el control de su propio cuerpo.

Una clase de ruido blanco muy agudo hizo lugar en sus oídos, ocultó su rostro entre sus manos intentando hablarse a sí mismo.

-Demonios, deja de hacer esto, no vas a conseguir nada si sigues victimizandote de esta manera...

Abrazó sus piernas y ocultó su rostro entre sus rodillas, mientras intentaba no hacerle caso a las voces en su cabeza que solo intentaban hacer que su estado de ánimo en ese momento empeorara y se volviera más inestable.

-¿Por qué no puedes durar ni tres meses sin pasar por una situación así? Se supone que debes estar estable, pero si estás destrozado y débil ¿Qué clase de ejemplo vas a dar estando así? Si tan solo alguna vez en tu vida pudieras hacer algo bien, si tan solo fueras una persona más estable que puede ayudar a los demás de una buena manera porque sabe que se mantiene en una linea recta, una cuerda perfectamente templada... Si tan solo no fueras un inservible que no puede ni tener una vida sana debido a las cosas externas.

Cada vez comenzaba a llorar con mayor fuerza, poco a poco empezaba a sentir su ropa húmeda por el sudor que emitía su cuerpo y su cabeza dolía por aquel ruido molesto y agudo que podía escuchar, pero no le hacía caso a nada de eso, simplemente no le importaba porque lo único que quería intentar controlar era su ánimo; sentía aquel sentimiento vacío pero a la vez tan poderoso que le causaba dolor, ni los rasguños que sentía en sus brazos ni los golpes en su cabeza superaban aquel temor que tenía en el momento. ¿Es posible sentir impotencia porque no puedes ayudarte a ti mismo? Quizá, y eso era lo que podía sentir en ese momento, era peor que un simple temor, era... Era como un cuerpo sin un alma, totalmente perdido y sin la capacidad de poder mantenerse en pie por su cuenta.

Sin embargo tenía una ventaja y era el hecho de que ahora podía recibir ayuda, tal vez por culpa de un pequeño descuido... Tal vez porque no se dió cuenta de que Kai no cerró la puerta al salir y tal vez porque ahora los chicos afuera estaban comenzando a escuhar toda la situación que estaba ocurriendo allí adentro.

•••

Estaba todo tranquilo con los otros chicos, Kai y TaeHyun se encontraban cada uno en sus cuartos, mientras que BeomGyu y SooBin estaban en la sala, aunque cada quien se encontraba haciendo en lo suyo, BeomGyu jugaba con un cojín y SooBin solo dibujaba cualquier cosa; cuando digo que "estaba tranquilo" literalmente estaba porque en algún momento SooBin y BeomGyu empezaron a escuchar algunos gritos y golpes, ambos se miraron y luego intentaron pensar de dónde podía venir.

-¿Qué está pasando?- murmuraron al mismo tiempo, luego se levantaron de sus sitios para intentar acercarse a la oficina, aunque bastante inseguros. No estaban tan cerca, pero ya alcanzaban a escuchar mejor los ligeros ruidos y golpes que venían de allí, junto con algunos murmuros, no sabían lo que decía pero igual conociendo la situación en que se encontraba se podía saber que no era nada bueno.

-¿Deberíamos entrar?- preguntó SooBin mirando a BeomGyu, y este le respondió con un tono de voz algo suave.

-No sé, no es por nada pero no somos las mejores personas para ayudarlo, no quiero ser negativo pero... Me entiendes.

-Me da risa que sigas intentando hacer algo bueno por alguien cuando ni siquiera contigo mismo puedes lidiar, das demasiada pena, SooBin. Ojalá en alguna de todas nuestras peleas y problemas que tuvimos hubieras muerto, yo sería feliz y tú no serías una maldita desgracia para este mundo.

-Si tanto dices que nunca en mi vida he hecho nada bien ¿Por qué no me dejas intentarlo?- BeomGyu escuchó a SooBin hablar e inmediatamente supo de qué se trataba, simplemente lo dejó hablar con ella.

-Porque va a salir mal y lo sabes ¿Ahora quieres mantenerte positivo? Qué tierno y patético.

-Al menos yo sí estoy intentando hacer algo por el bien de otros, no como tú.

-Eres tan ridículo, a veces quisiera creer que fuiste adoptado porque al menos yo sí salí normal- BeomGyu notó cómo en ese momento SooBin también estaba comenzando a alterarse, así que tomó sus hombros e hizo que lo mirara.

-SooBin, no sé qué pasa pero ahora no es momento para ponerte así, intenta lidiar con ella como puedas y sé fuerte ¿Sí?- el castaño asintió y luego volvió a hablarle a la voz de su hermana.

-Bien, tal vez tengas razón ¿Pero sabes? Al menos yo sí salí inteligente, no como alguien que desperdició toda su vida solo arruinando la de otra persona cuando podía estarse concentrando en la suya propia sin tener que meterse en donde no le incumbe- y fue en ese momento en que pudo darse cuenta de que consiguió que se fuera, al menos le dejó de hablar y no la sentía ya, BeomGyu lo miró con una sonrisa.

-¿Sabes algo? Debo confesar que me preocupa bastante el hecho de que nunca hablemos porque sé que está mal todo, sé que siempre hay cosas que entre todos nos ocultamos y... Y por miedo no lo decimos, y me frustra demasiado ¿Sabes? Y este momento me hizo saber una cosa, y es que aún si pensamos siempre lo contrario, somos de ayuda útil, así que... ¿Quieres?- SooBin asintió sonriendo y luego ambos decidieron finalmente entrar a la oficina de YeonJun, ya se veía algo más calmado y controlado, sin embargo se acercaron un poco a él arrodillándose frente suyo.

-¿Estás bien...?

•••

¡Hola! ¿Cómo están? Yo llorando pero eso es caso aparte.

Espero les haya gustado el capítulo, y no olviden dejar su votito y su comentario mwak.

¡Nos vemos en el próximo capítulo!

-Alex.