Touchdown

capitulo 25

Narra Sofía

Pasaron días, días largos y tristes, donde no salía de mi habitación, solo iba a la universidad y evitaba a toda costa a mi hermano y a Harry; y a pesar de que vivía con mi hermano, me encerraba en mi habitación o en ciertos casos me quedaba en casa de Sam para no estar con él, ni tenerlo cerca.
El día en que escuche hablar a Harry, ese día prometí, a mí misma, que lo dejaría, que dejaría de hablarle, que lo iba a olvidar, aunque, en la noche, cuando me envío la parte final del trabajo, dejo un mensaje que me hizo partirme en pedazos y llorar
aún más esa noche, y sí, no lo niego, hay noches en las que abro el mensaje y me pongo a leerlo, es como si reviviera ese momento y como si las imágenes de aquel día volvieran a mí.

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MAIL:
Para: Sofía Collins
Fecha: 15 de marzo de 2021, 9:35 pm
De: Harry Thompson
Asunto: Trabajo, el punto faltante.
Sofía Collins, mi Sofía Collins, mía. ¿Sabes lo bien que suena eso?
Quería poder explicar así sea una pequeña parte de lo que escuchaste hoy. Lo que escuchaste hoy fue un grandísimo error, no debí decir eso, y no voy a decirte que no debiste escucharlo, no tengo porque, no es como si quería ocultar algo, en absoluto, solo quería decirte que eso fue un error, dije eso solo por querer protegerte, por proteger lo de nosotros, lo que teníamos, si es que teníamos algo, pero para mí, si lo teníamos, y eso era lo que quería proteger, no quería que tu hermano nos separara ni nada por el estilo, pero resulte separándonos yo mismo.Perdóname por tanta estupidez que dije, por tanta estupidez que escuchaste, me odio a mí mismo por haber dicho eso, me odio a mí mismo por no haberle dicho la verdad a tu hermano, me odio a mí mismo por haber sido la razón por la que de tus tan lindos e iluminados ojos salieran lágrimas, pero sobretodo me odio a mí mismo
por perderte.

No sé cuanta credibilidad vayas a tener en mí, pero quiero que sepas que hablo con todo mi corazón, te necesito Sofía, nunca en la vida pensé en necesitar tanto a alguien como te he necesitado y te necesito a ti. Me haces feliz, me haces sentir

feliz y satisfecho, me haces no querer ni necesitar nada más en la vida, solo a ti, a ti, a ti, y mil veces a ti.
Quiero que me escuches, déjame explicarte lo que realmente sucedió, aquello que escuchaste no es cierto, tengo toda clase de intereses en ti, nunca me había interesado en alguna chica hasta que tú llegaste, hasta que tropezaste y te sostuve en mis brazos.
Sofía Collins, eres la mujer más preciosa que en toda mi vida jamás vi, no eres un juego, jamás lo serías y menos para mí.
Por favor déjame explicarte, déjame contarte lo que en realidad paso. Entenderé que no me quieras hablar ni tampoco ver, pero escúchame por favor. Estaré esperando por ti, el tiempo que sea necesario, bien sea que quieras o no verme, estaré esperando por ti.

Pdta: También fue la mejor noche de mi vida, cada segundo a tu lado es el mejor momento de la vida.

Pdta 2: Aquí adjunto el trabajo, espero verte en dirección mañana.
X
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Esas mismas palabras eran las que me hacían llorar en las noches, no sabía
cuánto más iba a poder soportarlo, no sabía cuánto más iba a poder aguantar; sí, lo necesitaba, quería perdonarlo, pero no podía, ese día seguía en mi memoria, sus palabras estaban repitiéndose constantemente en mis oídos, sencillamente no
podía.
Cada día en la universidad me lo encontraba, de alguna u otra manera lo veía, a lo lejos, a metros, en la práctica, en todo momento, en cada maldito instante, me estaba cansando, esperaba poder olvidarlo, o irlo olvidando pero realmente no
podía, así como tampoco podía escucharlo, estaba en una situación en la que no sabía ni siquiera que hacer, me dolía verlo y que no estuviera con el, me dolía no
verlo u sentirme culpable por no escucharlo, me estaba cansando de todo eso.
Y para mí suerte, Sam se estaba enrollando con su amigo, sí, con el amigo de Harry, curioso ¿No?
Recordar el cómo fue que se conocieron me hacía reír a carcajadas, pero luego me acordaba de que la ayude, y mi ánimo volvía a bajar, ese día, cuando decidí ayudarla, ese maldito día, el mejor y peor de mi vida.
…
Me encontraba en la cafetería de la universidad, junto con Sam y Cameron, estábamos riéndonos casi a carcajadas de las cosas que contaba Cameron, él

siempre buscaba la forma de hacerme sonreír. Sabía perfectamente que no estaba en las mejores condiciones, y tampoco preguntaba exactamente qué sucedió, como sucedió como para que estuviera así, pero siempre buscaba la forma de hacerme, por lo menos, sonreír.
Me levanté para ir por mi orden, usualmente no tomaba café, pero ese día pedí uno así que me acerque a la barra por el. Al levantarme, escuché la campana de la puerta sonando, anunciando que habían llegado nuevos clientes, inconscientemente voltee la mirada hacia la puerta, y estaba mi hermano abrazando a Harry con una sonrisa resplandeciente en la cara de ambos.
Una gran punzada se poso en mi pecho, sentí como en un par de segundos mi mundo se había caído.
Mis ojos se llenaron de lágrimas provocando que no pudiera ver con claridad, y sin más, fui por mi mochila, empecé a caminar hacia la salida, dejando a Cameron y a Sam hablando solos y creo que preocupados.
Al cruzar la puerta, note que en el pasillo había bastante gente, así que busque la salida para dirigirme a un lugar tranquilo y así mismo calmarme y tener un poco de aire fresco y poder pensar bien. Llegué al lugar más calmado y silencioso, busque algún árbol y al caminar, lo escuché.

-¡Sofía! ¡Espera!

-Harry…- y mis lágrimas empezaron a humedecer mis mejillas.