Touchdown

Capitulo 40

Años después.

-Sofía, Harry te está esperando abajo.

-Dile que en un segundo bajo.

Me di un último vistazo en el espejo, esta noche saldría con Harry a cenar y por alguna razón estaba nerviosa.
Hace ya dos años nos graduamos de la universidad, y si desde mi tercer año deuniversidad, empezando, lo conocí y esta era la fecha en que aún seguíamos juntos.

Y mejor que nunca. Mi promesa permaneció, aún permanecía, iba a estar con él tiempo que él quería, no me iba a ir de su lado.

Baje las escaleras, y ahí estaba. Sentado y hablando con mi padre y mi hermano, la relación entre ellos cada día era mejor , a veces llegaban los fines de semana y se ponían a ver partidos de futbol comiendo pizza y tomando cerveza, si, esos eran algunos de los fines de semana de ellos. Y yo cuando eso pasaba me iba a casa de Sam y salíamos a comer o algún lugar por ahí.

Harry al verme se puso de pie inmediatamente, y su expresión se notó más nerviosa pero lo intentaba disimular de alguna manera. Me acerque a él y con mucho cariño
beso mi mejilla, caminamos hacia la puerta y mi papá me detuvo del brazo haciendo que diera media vuelta, lo mire confundida y este me estrecho en sus brazos haciendo que pusiera mi cabeza en su hombro, alcanzaba a su hombro por los zapatos que llevaba.

-Cuídate hija, te quiero muchísimo.

-Lo haré papá, y yo también te quiero muchísimo, no lo olvides.

Me separé de mi papá y me despedí de Luke, quién también se despidió de una forma algo extraña e impropia de él. Mientras me separaba de él, se acercó Harry y cuando iba a caminar hacia la puerta, todo quedo en absoluto silencio y lo único que se escuchó fue a Luke.

-Mucha suerte Thompson, todo saldrá bien.

Abrí la puerta con mucha confusión y Harry salió detrás de mí. Llegamos al auto y di media vuelta, me despedí de nuevo con la mano y me subí al auto. Harry cerrómi puerta y camino hacia la puerta del conductor y entro. Dio un breve apretón en mi pierna, y acto seguido puso su mano en la llave. No les miento, la situación me estaba estresando muchísimo, no entendía nada de lo que estaba pasando, todos actuaban de una forma extraña. Harry se notaba muy nervioso, nunca en lo que llevábamos juntos lo había visto así de nervioso, así de tenso.

Durante casi todo el camino no dijimos una sola palabra, la tensión que se sentía entre los dos me estaba matando, me estaba torturando, no sabía si todo estaba bien, no sabía que era lo que le pasaba, y el por qué todos actuaban de una forma tan extraña.

-¿Harry?

-Di-dime mi amor.

-¿Todo está bien?

-S-sí, ¿por qué lo preguntas?

-Harry, todos están actuando de una forma tan jodidamente extraña, y tú, mírate, estas tan nervioso, además están tartamudeando cuando eso no lo haces.

-Todo está bien Sofía.

-Si como tú digas- voltee la mirada hacia la ventana.

Me enfadé, estaba enfadada de que no haya sido honesto conmigo, otras veces salíamos a cenar y todo estaba bien, “normal”, y esta vez no.

-Lle-llegamos.

Harry estacionó el auto en un parqueadero que quedaba al lado de un lindo restaurante, abrió su puerta y se apresuró para abrir la mía, salí del auto y me acomodé el vestido, Harry intento tomarme de la cintura, pero evite que lo hiciera.

-¿Estás bien? ¿Te pasa algo?

-Estoy de maravilla, gracias.

Caminé al lado de él sin hacer ninguna clase de contacto. Llegamos al precioso restaurante y al primer intento Harry me tomo de la mano. Entramos al restaurante y era divino, se notaba que era lujoso. Nos acercamos a la recepción y una chica con delantal blanco y vestida de negro nos atendió.

-Buenas noches. Su nombre por favor.

-Harry Thompson.

-Síganme.

Caminamos detrás de la chica y subimos al segundo piso, pasamos por todo el piso, hasta llegar a una especié de habitación. La chica se fue y me quede a solas con Harry, este dio un paso adelante corriendo la cortina que tapaba toda la habitación, dejando ver está llena de pétalos, y un hermoso ramo en mitad de la única mesa que había allí. Mire estupefacta a Harry, y mis ojos se intentaron cristalizar, me abalance a los brazos de él y lo abrace con toda las fuerzas que tenía.

-¿Por esto estabas tan nervioso?- pregunté.

Si algo así- rio aun con nerviosismo y entramos a la habitación, desde esta se podía ver todo el piso, y todos nos podían ver a nosotros.Nos sentamos y al segundo llegó el camarero, ordenamos y se retiró. Minutos después llego la comida, y nos dispusimos a comer, entre risas y pequeños bocados. La tensión entre él y yo había bajado un poco, pero aún lo notaba tenso y entre menos comida quedaba en el plato se ponía más y más nervioso.

Terminamos de cenar, y recogieron nuestros platos, llegando así de nuevo el camarero ofreciendo los postres.

-Todo se escucha tan delicioso- dije animada.

-Pide el brownie con helado, es delicioso.

Y eso hice, pedí un brownie con helado, continuamos nuestra conversación y sin demora alguna llegaron los postres, los dejaron en la mesa y quietaron la tapa del de Harry, acto seguido el mío.

Mis ojos se abrieron como platos al ver lo que había encima de este, un anillo y una pareja besándose. Luego, en un movimiento rápido Harry se arrodillo agacho a mi lado apoyándose sobre una de sus rodilla. De su bléiser, saco una cajita rosita, ese rosado, era el mismo del vestido que me regalo, de la cajita que me dio cuando me regalo el collar, solo que esta estaba mucho más pequeña.

-Sofía Collins, hasta el día de hoy he sido el hombre más feliz y afortunado, gracias por darme las mejores experiencias de toda mi vida, gracias por seguir aquí conmigo, gracias por darme hasta ahora los mejores años de mi vida- tomo un poco de aire- ahora, te quiero hasta que la muerte nos separé, quiero estar siempre contigo, quiero ser el único hombre en tu vida. Sofía Collins, ¿me harías el honor de casarte conmigo?
Sin evitarlo las lágrimas salieron sin aviso alguno. El corazón se me iba a salir del pecho, estaba feliz, emocionada, no sabía si esto era un sueño, pero sí lo era, esperaba nunca despertar.

-Si… Si quiero casarme contigo.