Niñera de mi vecino.

Capitulo diecisiete

Estaba aquí, tan guapo como siempre, pero con ojeras, su vestimenta no era la habitual, era como para salír a correr, tenía dos puntos en la ceja, marca de alguna pelea que habra tenido, lo seguia viendo como el nombre mas sexi que alguna vez conoci, pero... ¿Que hace aquí? ¿Esta era mi sorpresa? Vaya que estaba sorprendida.

Pareciera como si toda la empresa estuviera esperando nuestro proximo movimiento, sentía que todos estaban callados, pero se que no es así, que soy yo la que esta concentrada solo en su proximo movimiento.

-¿Que haces aquí?.- Quería echarme a sus brazos, pero no le daría el gusto.

-Tu padre se llevo tu auto y me pidio...- Lo interrumpí.

-¿Que haces en Londres?.- No  me interesaba que estuviera en la empresa, pero tendría que estar en california, en un bar, consiguiendo alguna zorra, o alguien quien llevar a la cama.

-Vine por ti.- Mi mundo se paralizo, mas de lo que ya estaba "Vine por ti" Aún no sabía como reaccioner ¿Derretirme en sus brazos? ¿Besarlo? ¿Golpearlo? ¿Irme? Definitivamente la ultima.

-Leila, me voy.- Le di un beso en la mejilla y tome del brazo a Sawyer como una madre que esta por castigar a su hijo.

Nos subimos a una moto, que no era la de el, supongo que la habra rentado o algo, no me aferre a su cintura como algunas veces lo hice, quería, abrazarlo, golpearlo, besarlo y hasta iría con el a la cama en este jodido momento, pero tengo el orgullo bien grande como para perdonarle todo y escuchar sus excusas baratas si en verdad me quisiera me hubiera venido a buscar antes. Paro antes de llegar a mi casa y se bajo de la moto cicleta.

-Sawyer quiero ir a mi casa.- Sonrió.

-Y yo quiero hablar.

-Llevame a mi casa, me sacare los malditos tacones, subiremos a mi habitacion.- Levanto una ceja.- Diras lo que tienes que decir y te iras a subir al primer avion que te lleve de nuevo a California.- Se subió.

-No hare lo ultimo si no te subes conmigo.- Arranco.

¿Por que hace esto? Ya ha sufrido demasiado como para que venga aquí a destruir los muros que construi para que mi tristeza no se notara, era demasiado, yo estaba bien, en realidad no, pero lo intentaba, no tiene por que hacerme esto ¿Por que no se lo hace a otra? Muchas chicas se enamorarian con mucha facilidad de el, las podría lastimar y verlas sufrir ¿Por que sigue insistiendo? Claro no me vio llorar personalmente, quería verme sufrir y no le di el gusto. Estoy enojada, muy enojada.

Llegamos a mi casa, Emma, mi hermano y mi padre hablaban muy animadamente, yo lo unico que podía hacer era finjir que todo estaba bien, como lo estoy haciendo desde el viernes, un día mas no haría daño.

-Oh hija, veo que conociste a...- Lo interrumpi.

-Fuimos amigos en California.- Dije entre dientes.- Me ire a cambiar.

-¿Puedo pasar al baño?.- Dijo Sawyer.

-Hija muestrale el baño de arriba.- ¿Acaso mi padre también me odia?

Claramente sabía que Sawyer no iría al baño, subí a mi habitación y el me seguía como perro faldero, de repente se escucho que la fuerte lluvia comenzo a llover, me tire en la cama y me saque los zapatos de un solo tiron, quería llorar, pero tenía que hablar con el, necesitaba al menos una estupida excusa de por que me mintió de esa forma, cuando simplemente me pudo haber dicho que no estaba preparado para una relación o alguna de esas estupideces que dicen los hombres cuando te quieren dejar. Me sente en el borde de la cama, apolle mis codos en mis rodillas y enterre mi cara en mis manos.

-¿Por que lo hiciste?.- Susurré mas para el que para mi. Sentí la puerta cerrarse y mire para comprovar si aún se encontraba ahí, si lo hacía.