Susurros Al Oído [+18] En Pausa

12.

Jared

La miro directamente a los ojos, esperando que diga que es una broma, porque vamos si es una broma, ¿cierto? Pero nada, ella no lo niega ni lo afirma, solamente procede a comentar sobre las decisiones de Ayelén, como si nada sucediera ¡Cómo si no acabara de decirme que se va a casar!

Siempre hemos sido Ayelén, mamá y yo contra el mundo, por lo que esta noticia me tomó por sorpresa. No voy a mentir y decir que mi madre nunca ha salido con algún hombres, porque tuvo dos parejas que se pueden considerar "serias" y luego salió con algunos hombres pero no funcionó. Claramente nunca la juzgue por eso y mucho menos le pedí explicación, porque después de todo ella es la mamá y yo el hijo.

Después de todo sus dos novios fueron buenos con mamá e incluso con mi hermana y yo, a sus ligues nunca los conocimos. Sin embargo, hasta el momento no había decidido dar un paso tan importante como lo es el matrimonio o el vivir juntos, pero veo que las cosas cambiaron. Aunque bueno, hará dónde yo sé, ella no tenía novio y mucho menos un prometido.

Amo el hecho de que mamá decida rehacer su vida y ser feliz, porque ella siempre ha hecho hasta lo imposible para que mi hermana y yo lo seamos, mi madre merece el mismísimo cielo después de todo lo que hemos pasado. Pero la idea de que se case no me gusta y no por ser un egoísta que solo quiere a su madre para sí mismo, porque hay que admitir que sigo siendo un mimado y apegado a mi madre, si no es el hecho que no conozco a ese hombre y no sé si tiene buenas intenciones con mamá.

Solo quiero que ella sea feliz y el que haga una vida sin tener que preocuparse por sus hijos es todo los que siempre quise para ella, que disfrute al máximo si vida. Pero reitero, no conozco a ese hombre y no quiero que tome una decisión apresurada que luego la haga infeliz.

-¿Me estás prestando atención?

-No -admito, ganándome una mala mirada de su parte-. ¿Cómo quieres que te preste atención cuando acabas de darme una noticia como esa?

-Sé que es impactante, pero hablaremos de eso después, mi prioridad ahorita es tu hermana.

Suspiro y peino mi cabello castaño con mis manos, en un vago intento por tranquilizarme.

-Sabes que no quiero meterme entre los problemas tuyos con mi hermana.

-Lo sé, osito. Pero quiero tu opinión, un consejo o algo.

-He apoyado a mi hermana en todas sus decisiones, sean malas o buenas porque la amo y quiero que sea feliz. ¿Quiso ir a estudiar a Francia? Bueno, la ayudé a averiguar sobre universidad, le pago sus estudios, un apartamento y cubro sus gastos. Haría lo que fuera por ella...

Estoy por continuar mi discurso, pero ella me interrumpe.

-Y agradezco lo que haces por tu hermana, pero no era necesario, nunca me ha gustado que gastes tu esfuerzo en nosotras, es innecesario. Soy quien debería pagar los gastos de Ayelén.

-Nunca vuelvas a decir que es innecesario y que no debo, mamá -gruño-. Trabajo y me esfuerzo para darles todo, para darte todo. Fue justo lo que tú hiciste con nosotros y ahora es mi turno de compensarte todo el esfuerzo, nunca han sido o serán una carga para mí.

Ella no dice nada por lo que continuo con el tema de mi hermana.

-Mi hermana se fue a Francia a estudiar administración, luego no le gustó la carrera y decidió estudiar Ingeniería Mecánica, la apoyé. Y luego otra vez, quiso cambiar de carrera y la volví a apoyar -niego repetidas veces con la cabeza-. Ahora dice que quiere regresar porque no se siente bien allá y que sus estudios no van tan bien como deberían, ¿Entonces que quieres que haga? ¿Qué la dejé allá?

-No, solo que tu hermana es una irresponsable, Jared. Tiene veinte años y ha cambiado de carrera universitaria tres veces, ahora quiere dejarla para volver y piensa irse a vivir sola, no quiere seguir con sus estudios. Quiere independizarse, ¿Pero cómo va a hacer si no puede tampoco mantener un trabajo?

Tiene razón, quiere regresar, tener su propio apartamento e independizarse pero no puede mantenerse ni tres días en un trabajo, y lo sé porque en estos casi tres años de estar en Francia ha intentado trabajar y no dura. Sin embargo, no sabía que pensaba dejar los estudios.

-No sabía que pensaba dejar la universidad, creí que volvería y seguiría estudiando aquí.

-Me dijo que la universidad no es para ella y luego verá que hacer.

De acuerdo, mi hermana está siendo una irresponsable y por más que no quiera meterme, veo que terminaré haciéndolo de todas formas.

Pienso una solución y cuando la tengo, no dudo en decírselo.

-Le comparé un boleto de avión para que vuelva -veo que tiene la intención de decir algo, pero le hago una seña con mi mano para que no hable-. Pero no la ayudaré con esta idea tan alocada, esta vez será la última que le colabore con algo. De ahora en adelante ella se responsabilizará por si misma y si quiere vivir sola que busque un trabajo.

-Me parece buena idea.

Camina hasta mí y besa mi frente con cariño.

-No sabes lo orgullosa que me siento de ver la persona en quién te has convertido, eres todo un hombre y eso solo me hace que sienta nostalgia del pasado, te amo Jared y quiero que seas feliz.

Siento un nudo establecerse en mi garganta y mis ojos cristalizarse. Escuchar que ella se siente orgullosa de mí es lo mejor del mundo.

-Yo también te amo, mamá -la abrazo con fuerza y dejo que algunas lágrimas se deslicen por mis mejillas-. Te amo mucho.

Nos quedamos unos minutos más así, hasta que ella se separa y limpia lágrimas con cariño. Con el cariño de una madre.

-No llores, que te ves feo haciéndolo -susurra haciéndome reír.

Ella es la mejor mamá del mundo.

-¿Ahora hablaremos del hecho de que te vas a casar?

Cambio de tema porque no quiero seguir llorando y realmente quiero saber sobre eso.

***

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