XX

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Quedaban pocos días para navidad.
Esa época la pasaba con sus padres sin salir de casa, solo se reunirían para cenar y luego darían regalos que tenían cosas de alto coste para luego irse a dormir y vivir otro día más en su vida. Aquella época cambió desde que su abuelita murió por una terrible enfermedad terminal, esos días eran los más felices de su vida, juntos comían, cantaban y celebraban. La casa inundada de risas y las bonitas palabras de su abuelita Jeon.

Pero ahora todo había cambiado.

Ahora tenía que celebrar aquellas fechas con gente que no conocía y que no recordaba él como se conocieron, tenía una estúpida escayola en su pierna que no le permitía moverse mucho y no sabía como convivir con ello. Suspiró cansado, derrotado al no saber que hacer... porque simplemente podría llamar a sus padres con su celular, el cual no sabía en donde estaba, pero aún así sus padres no habían llamado ni si quiera al azabache. Se supone que sus padres sabe a donde está, ¿porqué no le llamaban?

De un momento para otro Jungkook comenzó a sentirse solo y es que estaba completamente solo ahora mismo. Conviviendo con personas que no recordaba, sin sus padres... solo con unas muletas que le ayudaban de soporte. Aquello lo cual era lo único que le mantenía en pie. Permitió a sus lágrimas resbalarse por su mejilla sin piedad, sacando un pequeño jadeó de su boca. Daba gracias a que estuviera completamente solo en la casa, porque no quería enfrentarse a las preguntas que le haría el azabache.

Su mente viajó días atrás, en donde se vio visualizado de nuevo en aquella camilla de hospital con la escayola por toda su pierna, pero lo que estaba pensando el muchacho no era la situación sino aquella una frase que no paraban de decirle por cada cosa que preguntaba.

«Tienes que recordar, Jungkook.» eso fue lo que oyó absolutamente de todas aquellas personas que estuvieron con él desde que despertó.

-¿Qué es lo que tengo que recordar?- sollozó alto.- Estoy perdido...

Verdaderamente estaba perdido.
Era como si estuviera adentro de un laberinto del tamaño de un planeta.

Su mente pasaba por todas aquellas caras que vio en la sala del hospital. Podía sentir él como conocía a todos pero a la vez no... Jimin, Alexa, Yoongi, Hoseok y de repente un pitido se acumuló en sus tímpanos. Cerró sus ojos con fuerza y en su cabeza comenzaron a reproducirse unas rápidas imágenes que lo dejaron inquieto: distinguía un gran edificio y una placa en donde definía que aquello era una universidad, pudo ver a una chica y a un chico rubio sonriéndole directamente, compartían mesa en lo que parecía ser en una cafetería y en su cabeza pudo escuchar una conversación...

"Por favor, necesito recordar" era lo que se decía día tras día.

«¿Iremos?»
«¡Por supuesto que sí! Le diré a Hoseok que venga también, será divertido.»
«Yo no voy, pasaroslo bien chicos.»
«¡Oh vamos, Jungkook!»
«Lo siento...tengo un examen importante de marketing el martes y no puedo suspenderlo. Seguro lo pasáis mejor sin mí.»
«Inténtalo, no te va a pasar nada y si te encuentras mal o no te gusta podemos volver a casa, ¿si?»
«Me lo pensaré.»

Entonces comprendió que no podría tener diecisiete años si ya había entrado a la universidad. Allí donde conoció a Alexa y a Jimin, sus dos mejores amigos y también a Hoseok, que al parecer era el novio de la chica. Pero... ¿aquella conversación era tal vez de una fiesta? La mente de Jungkook comenzó a unir clavos. Cuando aquella pareja vino de visita a su casa con la pequeña niña, Jungkook recordó el haber conocido a Kim Seokjin en una especie de lugar con luces y música. ¿Podría ser que en aquella fiesta había conocido al pelirosa? ¿Y que pasaba con RM?

«Espera... ¿RM? ¿De donde he sacado esas dos letras?»

Su cerebro estaba bajo las dudas y tal vez lo mejor sería a que Taehyung regresara a casa para aclarar un par de cosas.



"𝐄𝐓𝐄𝐑𝐍𝐈𝐓𝐘" [ᵛᴷᴼᴼᴷ] SEGUNDA TEMPORADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora