11-Invencible

487 21 2
                                    

Kate

-Ya puedes terminar con eso -le dije con molestia a Naty, quien me estaba poniendo una redecilla.

-No te quejes ¡Ok! Tu eres la que no quieres que se enteren que peleas ¡Sr.Invencible! -Dijo ella asiendo muecas y con un tono agudo, haciendo que Helen ría como loca.

-Pues no nadie se puede enterar porque no dejan participar a mujeres -dije algo furiosa, siempre tenemos la misma conversación cuando vamos a las peleas.

-Lo que tú digas. Que vas a hacer con esta preciosura ¿Quien es tu tía favorita? -Dijo apretando los cachetes de Helen.

-Tía Kate -respondió la niña sonriendo.

-¿Cómo?¡No! -Dijo Naty haciéndose la ofendida.

-Toma -dije y me reí -Haberle comprendo un vestido de princesa -dije burlándome de Naty, hoy fuimos de compras y la verdad fue como ser niña de nuevo, compramos juguetes, cosas para el cuarto, disfraces y ropa. Me encantó que nos compramos pijamas a juego. Solo llevamos dos días juntas y parece que nos conocemos desde que nació.

-Ya me enojé -dijo Naty asiendo cara de perrito mojado lo que hizo a Helen reír.

-Ya la niñera está al llegar -dije viendo la hora en mi reloj.

-A dónde vas tía Kate -dijo la niña parándose junto a mi silla.

-Ahhh... -No sé que decirle, no le puedo decir que voy a una pelea.

-Vamos a una fiesta para mayores -Naty se me adelantó, lo que agradecí.

-¿El tío Dilan y el tío Jason van? -Preguntó la pequeña. Naty le enseñó a decirle tío o tía a todo el mundo hasta a Dilan.

-No solo nosotras pequeña -contesto Naty.

-Oki -dijo para volver a sentarse en la cama, lo cual se le dificultó un poco por su tamaño.

                              [...]

Después de que llegara la niñera, fuimos a la pelea yo y Naty. Nadie más sabe que peleó solo Naty y le tengo proivido decirle a Jason así que tampoco le conté a Dilan mejor así.

-De el lado derecho, de rojo, Invencible -ese era mi aviso para salir, Naty había recogido mi cabello y aplastado mis pechos para que no sé notarán traía una camisa roja un poco ancha y unos pantalones suelto de hombre. -De el lado izquierdo, de negro, El Reí -Frente a mi apareció un hombre de piel oscura que fácil mente me saca una cabeza.
      
                             [...]

Pelea tras pelea pasaron hasta la batalla final, frente a mi se paró un hombre blanco que es mucho más alto que yo, bien definido y Dilan se vino a mi mente la verdad se parecía vastante a el. Su casco solo dejaba ver sus ojos, esos ojos verde esmeralda que lo hizo relajar sus hombros al encontrarse con los míos.

-Kate -dijo hacercandose a mi.

-Dilan -dije bajito, no solía hablar porque me reconocerían enseguida, pero solo puedo pensar en que tenemos que peliar.

-¿Que haces aquí? -Dijimos al mismo tiempo.

-No lo puedo creer no me dijiste nada -dijo quitándose los guantes y el casco.

-Tu tampoco imbécil -dije haciendo lo mismo que el, pero cuando quite mi casco mi pelo negro calló y todo el mundo empezo a murmurar.

-No me lo puedo creer, como me ocultasté que peleabas. Te lastimaron y golpearon, no estube ahí, no me dijiste -dijo dando la vuelta para irse.

-Dilan yo se cuidarme sola y no te lo dije por eso, si me vieras peliar le partirías la cara al que me tocará -dije caminando junto a el.

-Sabes, tienes razón ¡Pero no me da la gana! Yo era quien te tenía que defender de esos idiotas y si tú puedes sola no me necesitas.

-Claro que te necesito bebé -dije con ternura lanzandome a sus brazos y enrollando mis piernas en su cintura.

-¿Porque no puedo enojarme con tigo? -Preguntó recibiendome en sus brazos.

-No lo sé, grandullon -dije dándole un pequeño beso en los labios.

Unas sirenas de policía empezaron a sonar y todos empesamos a correr y la gente gritaba. Dilan y yo corríamos de la mano y nos encontramos con Naty para correr juntos hasta los autos.

-¿Que paso? -Dijo Naty una vez que Dilan empezó a conducir.

-¡Que gran pregunta, amiga mía! -Dije en forma de broma pero no le hizo gracia.

-Tu también estás aquí ¿Porque el otro amigo de ustedes no hizo nada?¿Porque las deja hacer esto? -Dijo Dilan un poco molesto.

-Emm...Jason no lo sabe -dijo Naty.

-A ósea que peleas y te traes a Naty y para colmo vienen solas y nadie saben dónde están -dijo Dilan alzando la voz.

-Ya no es para tanto ¡Ok! Además nunca nos ha pasado nada -dije restándole importancia haciendo un gesto con la mano, el cual no funcionó porque Dilan freno en seco.

-Mira ¡Pequeña!... -Suspiro intentando calmarse -Como vuelvas, como vuelvan las dos ha hacer algo así y no me informen van a tener graves problemas ¿Entendido? -Incluyó a Naty pero no despegó sus ojos de los míos, la verdad Dilan puede llegar ha ser intimidante, no solo por ser grande y definido, sino por sus ojos que te hacen sentir pequeña cuando está enojado.

Todos nos quedamos en silenció y el arranco. No me molestaba que Dilan me protegiera, era lo que siempre había querido ha alguien que me tratara como una princesa aunque intenté negarlo muchas veces, pensaba que no existían hombres así hasta que lo conocí el se está convirtiendo en mi príncipe sin nisiquiera ser novios formalmente. La vida me hizo fuerte mientras lo esperaba y el lo tiene que entender, voy a dejar que el me proteja como siempre he querido y el también quiere, pero yo también lo voy ha hacer con el aunque se enoje.

LAS COSAS PASAN POR ALGO✔️✔️EN EDICIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora