Pop Cakes.

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Con la mirada en el piso y sus ojitos llorosos el cachorrito caminaba hacia la salida de su escuela, ese día su maestra había sido especialmente muy cruel con el y le había dado un par de golpes en las manos con una regla, mientras que los niños que lo molestaban todos los días lo habían empujado bastante fuerte en el receso y el pequeño había caído en un pequeño charquito de lodo ensuciando todo su uniforme y llevándose unos rasponcitos en las manos y en las rodillas, para nada había sido un buen día para el cachorro, solo quería llegar a casa de Jimin hyung y poder llorar acurrucadito en los brazos del omega con aquel delicioso aroma que tanto lo tranquilizaba, atravesó el pateo delantero de la escuela y al mirar hacia enfrente vio al mayor, el cual al ver el estado de su cachorrito borro su sonrisa y corrió hasta el.

-¿Mi dulce corazón que te paso?- pregunto enseguida el rubio arrodillándose frente al menor, no importándole en absoluto si se lastimaba las rodillas, mientras que examinaba las manos y rodillas del cachorro el cual ante aquel lindo apodo dicho con tanto cariño, se soltó a llorar -No pasa nada mi amor, tranquilo- se apresuro a tomar al cachorro en brazos y se levanto, mecía suavemente el cuerpecito sucio y tembloroso entre sus brazos mientras reprimía sus propias ganas de llorar.

Las personas que recogían a sus hijos les veían pero al omega no podía importarle menos, lo único que quería era que su pequeño dejara de llorar, aun con el menor en brazos se apresuro a llegar a su casa, pasando por la dulcería aun con el cachorro llorando en su hombro pero ya no eran los fuertes berridos que soltó frente a la escuela, ahora eran suaves pero constantes sollozos un tanto lastimeros, Taehyung el cual al verlos se preocupo de inmediato pero prefirió dejar que su hermano se encargara.

Jimin subió hasta el departamento, le quito la mochila y los zapatitos al cachorro y lo llevo al baño, donde puso a llenar la bañera con agua tibia y le quito el uniforme al cabizbajo infante, una vez la tina estuvo llena Jimin metió al pequeño en el agua tibia y limpio con cuidado y paciencia cada herida del pequeño, junto con su cabello que estaba manchado de lodo, el pequeño no dijo nada en ningún momento, solo se mantuvo sollozando y sorbiendo su pequeña nariz, el omega se apresuro a limpiar al cachorro y al terminar le puso solamente una de sus playeras de pijama, la cual cubría a la perfección el pequeño cuerpo, dejo al cachorro sentado sobre la cama de su habitación y puso la ropa del menor en la lavadora y después de un largo tiempo en silencio el omega volvió a tomar al pequeño en sus brazos y al fin decidió hablar.

-Necesito que me digas que fue lo que ocurrió mi amor- susurro mientras acomodaba al cachorro en sus brazos.

Jungkook se mantuvo en silencio, únicamente aferrándose al suéter de lana color gris que el omega llevaba puesto.

-Si no me dices que ocurre no voy a poder ayudarte Kookie- susurro sobre el pelinegro y húmedo cabello del menor -Se que debes tener miedo hijo, pero papi Jimin va a protegerte siempre- aseguro aguantando sus propias lagrimas.

Los ojitos del cachorro se volvieron a llenar de lagrimas y se aferro con mas fuerza al mayor, se separo un poco del cómodo hombro del contrario y miro directamente los ojos del mayor.

-P-papi- sollozo y se abrazo con fuerza al cuellos del omega.

-Tranquilo mi amor, papi te cuidara, todo estará bien hijo- susurro meciendo el cuerpecito del cachorro mientras dejaba salir sus lagrimas reprimidas.

-P-papi ya no q-quiero ir mas al jardín de n-niños- se separo un poco del hombro del omega para poder quedar cara a cara con el -Por favor papi, no dejes que mi padre me obligue a volver, ya no quiero rogo el cachorro con la cara llena de lagrimas y el labio inferior entre sus dientes.

El lobo de Jimin se sintio desfallecer ante toda la desesperación que el cachorro reflejaba, se odiaba por no haber notado todo lo que le estaba pasando a su cachorrito, mientras que el corazón de Jimin se estrujo ante tal suplica y se prometió hacer lo posible por sacar al cachorro de todo su sufrimiento. El omega abrazo con fuerza el cuerpecito en sus brazos y seguido meciéndolo. Cuando ambos estuvieron más tranquilos se sentaron en la cama y el cachorro le conto todo lo que le pasaba tanto en la escuela como en su casa al mayor, le hablo de sus compañeros que le molestaban, de su maestra que le regañaba por todo e incluso le pegaba en las manos y le hablo de su padre, el cual lo ignoraba casi todo el tiempo, Jimin sintió una increíble rabia crecer dentro de el, no era posible que todo ese le estuviera pasando a un pequeño de 5 años y nadie hiciera nada al respecto, tomo su celular y le envió un mensaje a la nana del cachorro, donde le pedía que trajera ropa para el menor ya que su uniforme estaba lavándose, dejo su teléfono en el mueble junto a su cama y volvió a tomar al cachorro en sus brazos, lo acomodo de tal forma que uno de sus brazos pasaba por debajo de la cabeza del cachorro y el otro sujetaba sus piernas, haciendo una especie de cuna pequeña para el cachorro.

¿Y ese dulce? •Yoonmin•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora