[LARINA] No Le Digas A Nadie [Marina G!P] [EDITANDO]

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He pasado días y noches pintando a la fabulosa Lana. No la he podido ir a ver.

Por otra parte de mi gran confusión, Lizzy se comportaba de manera extraña conmigo, era inexplicable, a veces era molesta conmigo y otra veces parecíamos mejores amigas. Supongo que eso me gustaba a mi, lo inexplicable.

Miraba como Lizzy cantaba frente a algunas personas que bebían. Estaba todo el pequeño público hipnotizado, me gustaba como ella se manejaba en el escenario. Segura de sí misma. Aplaudí igual que el resto, me miró y su cara se mantuvo seria, sin ninguna expresión y eso dolió más que una pierna rota. Algunas veces sonreía, otras veces me enseñaba su dedo del medio, sabía que ambas iban con agrado, pero esta mirada no.

Las rondas de alcohol no paraban y todos le pedían a Lizzy que siguiera. Incluso de vez en cuando yo los animaba.

-Cantaste bien-. Le regalé un cumplido. 

-Gracias, usaste bien tus manos... Eres rápida con los tragos-. Habló casi sin voz, le di agua para que tomara. Me alegré un poco por dentro.

-Creo que estás mala de tus cuerdas-. Le sonreí, se veía realmente muy triste por eso: -Lo hiciste bien, muy bien-.

-Lo sé. Ayer... Discutí con mi novio-. Ya entendí la situación.

-Sabes algo Lizzy... Tal vez yo no tengo demasiada experiencia en las relaciones pero sé que esa no es sana, para ninguno. Si yo te gritara de la nada... ¿Qué harías tú? adivino, no dejarías que yo te pasara a llevar ¿por qué lo dejas a él? Nada marca la diferencia, no hay diferencia. Una persona que te ama y te quiere, te respetará, si él no lo hace y dice que te quiere, vaya... Algo tendrá mal él-. Sin querer había tomado su mano, pero no la quitó ni parecía estar enfadada. Su rostro estaba en una dirección, perdida en la nada.

-¿Lo amas?-. Pregunté, me miró a los ojos. 

-Es mi novio-.

-Lizzy, he amado a alguien que nunca tuvimos una relación íntima, no había una posibilidad. También he estado con alguien, pero nunca logré amar. Estar con alguien no significa que lo amas, estar con alguien que no amas es horrible...-.

-No estar con alguien que realmente amas también lo es. Creo que... no lo amo-. Yo sabía, en el fondo de mi corazón sentí una chispa de felicidad.

-¡Es hora de cerrar!-. Habló un compañero. 

Lizzy me miró tranquila, con una sonrisa. 

-Gracias...-. Susurró y se fue al baño.

Junto a otros trabajadores cerramos el bar, limpiamos todo y nos cambiamos a nuestra ropa cómoda. Me puse perfume, mirándome por tercera vez en el espejo grande. 

-Tan arreglada-. Lizzy estaba parada detrás de mi. 

-¿Qué? Estoy... normal-. Simplemente un poco de perfume.

-¿Saldrás o algo?-. Ordenó su bolso mientras me miraba. Asentí. 

Cuando ya se tenía que ir la tomé del brazo: -Lizzy, por favor... Cualquier cosa tienes mi número y mi dirección ¿ya?-.

Asintió, besó mi mejilla y salió del baño. Salí segundos después de ella. Luego de varios días, veré a la chica que he estado pintando. La última vez que nos vimos fue algo extraño y... excitante. Fue sobretodo, algo espontáneo. Diría que no estaba acostumbrada a eso pero mentiría, solo que por alguna razón frente a esa misteriosa mujer me sentía pequeña. Era casi como yo, pero mucho más intensa.

Los guardias me agarraron como de costumbre, siempre me revisaban desde la primera vez que pasó todo. Tomé un trago como la vez anterior y miré a Lana bailar, esta vez llegué más tarde.