Los Pecados de Alexandria (Alexandria's Sins) [Levi/Reiner/Porco/Zeke x OC]

5 - Hablemos de bisexualidad

-Este va a ser un día de mierda -dije en el ascensor de la editorial.

Con ojeras y café en mano, me dirigía a la oficina del departamento de arte, en donde era bastante probable que la tortura siguiera.

No había podido dormir nada. El mensaje de Zeke me había puesto muy ansiosa. Pensé en él toda la noche y me imaginé los posibles escenarios que implicaban ese mensaje ¿Qué quería decirme? No podía aguantarlo más. Necesitaba saberlo.

Le había contestado que pasara por mi esa tarde, que no iba a hacer otra cosa que comprar cuerdas de guitarra luego del trabajo. No había recibido respuesta, y mi estado de nervios ambulante empeoró considerablemente.

-Buen día -murmuré llegando a la oficina.

-Cane…-respondió Ackerman a punto de reprenderme.

-¡Jefe! -me corregí casi automáticamente.

-Ahora si. Buen día -devolvió mi saludo-Tienes un aspecto horrible.

-Dormí mal anoche. Pero no se preocupe, soy bastante productiva, incluso con pocas horas de sueño -afirmé tomándome un sorbo de café.

-Deberías. Eso no es excusa. Yo no duermo más de 4 horas al día y mi rendimiento es excelente -sentenció el jefe malhumorado- Y arréglate, porque en unos minutos tenemos que ir al set de grabación.

Maldita sea. Había olvidado que iríamos a la grabación de la película. Ese fue el único trabajo que hice con mucha dignidad, por lo que era muy importante que yo esté ahí.

May Leeds es una escritora de renombre. Escribe libros que mezclan la ficción con los aspectos artísticos de la danza. La editorial Shiganshina, esta editorial, se encarga de publicar sus libros desde hace más de 15 años. Cuando trajo el manuscrito de su nueva novela hace dos años, nadie sabía acerca de música clásica, ni siquiera la propia May. La historia trata de una bailarina de danza clásica que se enamora de un director de orquesta mucho mayor que ella.

Como Hange sabía lo que decía mi solicitud de pasante, me pidió trabajar en el proyecto en conjunto con el departamento de arte. Logré buenos resultados, tanto profesionalmente como a nivel personal, dado que me gané la confianza de May.

Nadie se imaginó que solo a 10 meses de su publicación, el libro fuese un éxito total, tanto así que ya se estaba por filmar una película sobre la misma, la primera película sobre una novela de May.

Nosotros actuábamos como representantes de Shiganshina y de May, ya que ella vivía en la ciudad aledaña. Ese día debíamos dirigirnos al set de grabación porque iba a ser el primer día de grabación. Si. El trabajo pesado recién empezaba…

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-¿Qué esperas, mocosa? Súbete -ordenó el jefe desde su auto.

El estacionamiento de la editorial no parecía buen lugar para que escapara corriendo, sobre todo si el enano estaba al volante. Quien sabe cuántas veces me hubiera arrollado con su auto.

No quería aseverar su malhumor, por lo que hice caso y me subí al asiento del copiloto.

Santa mierda de topo. Ese vehículo era un cementerio. Ninguno de los dos dijo ni una palabra por unos minutos, hasta que abrí mi bocota.

-¿P-Podemos poner música… jefe? -balbuceé con miedo.

-No -respondió cortante.

-No se ofenda, pero usted es muy aburrido -establecí queriéndome tirar del vehículo en movimiento.

No sé por qué carajos dije eso, pero de pronto quería desaparecer. No, no quería, tenía que, sobre todo si no deseaba ser asesinada por cierto hombre. Me temí lo peor, pero su respuesta fue medio dudosa.