Mi padre solía hablar de las malas costumbres. Él decía que Bertholdt tenía una mala costumbre de dormir en posiciones raras y que eso podía arreglarse con disciplina. Me dijo lo mismo cuando le confesé que me gustaban los chicos y las chicas. Hoover creía que era casi una falta de disciplina de mi parte, por lo que un buen día lo trajo a Colt a casa, quien era mi compañero de secundaria, y me "obligó" a tener una cita con él.
Todavía recuerdo la cara del pobre Grice. Ni él ni yo queríamos tener una cita. Él solo acataba porque no quería que lo echaran de Marley. La cosa es que cuando mi padre nos dejó en un cine, cada uno se fue por su lado, a cualquier otro lugar menos a ese maldito cine. Nunca tuve una cita con un chico en un cine, y cuando tuve la oportunidad de hacerlo a los 16 años, hui despavorida.
Tenía esos recuerdos a flor de piel esa mañana, en el set de la película. El disparador fue Ellen, claramente. Estaban filmando una escena en donde ella vestía un hermoso vestido de seda color cielo, sonriendo a lo lejos con el coprotagonista. Parecía un ángel, de esos que se ven en las pinturas clásicas.
-Oye, si la miras demasiado se va a gastar -interrumpió mi jefe cuando cortaban la escena.
-Por lo menos yo sí puedo mirarla. A usted ni siquiera le dirige la palabra -repliqué por lo bajo en forma de burla.
Teníamos que seguir aparentando que éramos compañeros de trabajo, que no éramos nada más que eso, por lo que debía dirigirme a él como "jefe" en el horario y el lugar laboral.
-Muy gracioso, mocosa -me miró amenazantemente- Oye, ¿pudiste dormir algo anoche? -preguntó dándome una taza de café.
-Si. ¿No vio que me quedé dormida? Estaba agotada. Oh, gracias -aceptando el café.
-No te vi. No duermo demasiado, así que fui al living y me dormí en el sofá -estableció Ackerman, apoyándose sobre la pared con una taza de té entre sus manos.
-¿Sufre de insomnio? -pregunté tomando un sorbo de café- Yo también tengo insomnio cuando estoy muy ansiosa.
-¿Ansiosa? ¿Por qué te pones así? -interrogó cambiando el foco de la conversación.
-Por muchos motivos. Me diagnosticaron trastorno de ansiedad generalizada cuando tenía 10 años y desde ese momento lo sé -dije mientras que todos en el set se tomaban un descanso.
-Ya veo. ¿Y cómo tratas la ansiedad? -preguntó el jefe un tanto intrigado.
-Terapia. En mi caso también tuve que acudir a la medicación.
-¿Medicación? -volvió a interrogar incrédulo.
-Si. Mi padre me llevó a un psicólogo en primer lugar, cuando le dije que tenía una amiga imaginaria y cuando vio que era una "niña difícil". Luego un psiquiatra me vio y me dio muuuuchas pastillas -respondí con un tono de voz poco feliz.
-No me jodas. Eso no debería ser legal -sentenció Ackerman bebiendo té.
-¿Medicar fuertemente a una niña de 10 años? Por supuesto que no.
-¿Y tú sí tenías una amiga imaginaria? -preguntó cambiando nuevamente el foco de la conversación.
-Claro. Se llamaba Ymir. Era una linda niña rubia muy pequeña, que nunca hablaba, pero que jugaba conmigo -relaté mientras caminábamos por el set.
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Los Pecados de Alexandria (Alexandria's Sins) [Levi/Reiner/Porco/Zeke x OC]
Romance[EN EDICIÓN] Todo dolor se transforma, evoluciona. Todo sufrimiento te envuelve, te cobija y te atrapa. Y yo... yo estaba atrapada de cuatro formas distintas. El fic se tratará de personajes del universo de Shingeki no Kyojin (Levi-Reiner-Porco-Zeke...