¿Enemigos con derechos?

C10: las reglas del trato

Ahora sí se viene lo bueno.

Déjalo hablar.

-Las reglas del trato. Seré simple, exclusividad, privacidad, confianza, respeto. -dijo Nicholas.

-Bien, puedo darte eso. Creí que serías algo extremista.

-No, otra cosa. No pondré esa reglita de no enamorarse ¿Quien puede controlar sus sentimientos? Si se da pues bien, si no, igual. -se encoge de hombros.

-Siempre hacen esa regla y el primero en enamorarse es la o él que la pone.

Y muchas veces son tan orgullosos que no aceptan que se enamoraron y lo terminan jodiendo todo.

-Exacto, pero no estamos en un libro. Así que, seremos realistas. Quiero confianza entre nosotros. Si, nos vamos a acostar, pero si no hay confianza esto no funcionará.

Déjame dudar lo del libro.

Shuuuu.

Tenía razón, la confianza es muy importante en todos los ámbitos. Tengo que confiar en él, como él en mi para poder acostarnos por un tiempo. No sé cuánto vaya a durar esto. También el respeto es bastante importante.

-Completamente de acuerdo.

-¿Tienes alguna regla o algo que decir rubia?

Lo pensé.

-Mmm, que ambos seamos capaces de probar cosas nuevas y no todo se vuelva monótono.

-Bien, me gusta probar cosas. -noto el doble sentido de sus palabras. -¿Hay trato?

-Lo hay.

Él se levanta, viene hacia donde estoy y le da vuelta al banco para quedar frente a frente. Separa mis piernas para posicionarse en medio de ellas y pone una mano en mi mejilla mirándome a los ojos.

-Così bella. (Tan bella) -escucharlo hablar en italiano en un pequeño murmullo y con su voz ronca me pueden.

Toma todo de mi.

Por primera vez estamos de acuerdo.

Sus ojos no abandonan mi rostro, como si guardara cada milímetro de el en su memoria, su mirada choca con la mía. Azul y azul.

-Azzurro come il cielo (azul como el cielo) -bien, me perdieron.

-Si sigues hablándome así, harás que me tire encima de ti.

Creo que nos acostumbramos tanto al inglés que escucharlo hablar en italiano era tan nuevo para mi.
Pudimos hablar en italiano desde un principio, pero probablemente no lo hubiera soportado.

-Tal vez eso quiero. -su nariz roza la mía.

-Sere cliché; estás jugando con fuego. -el suelta una pequeña y ronca risa.