-Enemigos con derechos, si escucharon bien. A Nicholas le gusta ser creativo y se inventó ese estúpido termino... -digo rodando los ojos.
-Te escuché Charlotte. -escucho desde la habitación a Nicholas. Sonrió.
-Ups. Bueno, está es la historia de com...
Este es el extra de la regreacion de ese sueño erótico de Nick...No será muy largo.
Probablemente esté sea un extra +21... Si está potente.
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Llegamos a la cabaña. Nos fuimos de aquí el año pasado. Je, je. Ando estúpida.
Siempre.
Vocecita del demonio.
Tan tierna.
—Sabes, cuando estabas en Nueva York soñé algo. Es una de las razones por las que nos estamos quedando aquí. —mi novio me habla.
Weeeyyyyy es mi novio.
—¿Que soñaste?
—Que te follaba en una cabaña con vista al mar.
—Atrevido. —me rio y enredo mis brazos en su cuello.
—Te encanta que sea así. —baja su rostro y comienza a dejar besos en mi mandíbula.
—¿Que estamos esperando? —levanta su mirada con confusión. —Para que me folles en nuestra habitación con vista al mar. —sonrio.
—¿Por que no te encontré antes? Definitivamente eres todo lo que necesito. —me levanta haciendo que enrede mis piernas en su cadera.
Camina a la habitación y entra tirándome en la cama. Baja los tirantantes de mi vestido, no llevo brasier el lo nota y pellizca mis pezones haciéndome jadear. Por los grandes ventanales entra la luz del sol y se escucha el sonido de las olas.
Termina de sacar mis vestido y quedó en unas diminutas bragas blancas. No quita mis tacones y me voltea. Hace que ponga mis manos en la cabecera de mi cama.
—Te quedarás ahí esperando que te folle. ¿Verdad cariño?
—Si. —le respondo.
Me excita demasido que se ponga a darme órdenes al follar. En si, el me excita por completo con lo que hace. Escucho como se quita la ropa, se sube a la cama detrás de mi y comienza a acariciar lentamente mis muslos. Me da una palmada en cada uno de ellos, gimo cuando hace lo mismo con mi coño. Mi humedad hace que la palmada suene más.
Con sus dedos pasa mi humedad hasta mi ano y mete dos dedos al mismo tiempo en el que me penetra. Mi gemido es alto mientras me embiste por ambos lados sin parar.
—Tan húmeda como en mi sueño. —dice en medio de un jadeo.
Sale de mi para meter su pene en mi ano y los dedos en mi coño. Con su mano libre agarra mi cabello y tira de el para embestirme con más fuerza. Arquea sus dedos dentro de mi llevándome a una sensación diferente. Sin que yo lo espere un chorro sale mi, los dedos de Nick frotan mi clítoris esparciendo la humedad con rapidez.
Las sensaciones me hacen rodar los ojos, siento que me voy a desvanecer, el climax llega a mi. Él no para en ningún momento, sus dedos vuelven a estar dentro de mi haciéndome tener un orgasmo múltiple y duradero, cuando otro chorro sale de mi. Nicholas llega a su liberación y sale de mi haciéndome caer rendida en la cama.
—Jodida... Mierda. Eso fue alucinante. —le digo con la voz entrecortada y los ojos cerrados. —Fuck, nunca había tenido un squirt.
—Conmigo ese no será el único. —promete. —¿Ya te cansaste? —me pregunta riendo.
—¿Me estás retando? —lo empujó a la cama.
—Vamos, monta mi polla. —me subo encima de él y guío su pene a mi entrada, me dejó caer lentamente. Él pone sus manos en mi cintura.
Me inclino hacia delante apoyándome en su pecho. Moviendo mis caderas a un buen ritmo. Entra profundamente en mi. Me deja una nalgada y sonrió viéndolo a los ojos sin dejar de moverme. Me levanta un poco por las caderas para comenzar a mover sus caderas debajo de mi.
—Nick, más. —le pido en medio de gemidos.
—Voy a darte todo lo que quieras, rubia. —cumple con lo pedido follandome más.
Luego me deja que siga yo mientras le da atención a mis pechos. Mis gemidos lo hacen apretar más fuerte mis senos. Me muevo en círculos sobre él.
—Joder. —la maldición sale de su boca por mis movimientos.
Ambos llegamos al preciado orgasmo. Suspiro, ambos estamos con las respiraciones más que aceleradas. Salgo de él y me siento en la cama. Nick deja un apretón en mi muslo y se levanta.
Cuando siento que la energía volvió a mí, me levanto lentamente para cambiar las sábanas.
—Ve a limpiarte yo lo hago. —deja un beso en mi frente y asiento caminando hacia el baño.
Orino y me limpio bien. Lavo mis manos y salgo del baño. El pelinegro está terminando de acomodar las almohadas. Va hacia el baño y vuelve, aún sigue desnudo y disfruto las vistas. Me mira y sonríe.
—Una foto dura más.
—Mmm, me agrada esa idea. —se ríe para después acostarse a mi lado. No sé qué hora es pero no me importa.
Me recuesto sobre su pecho, subiendo una pierna encima de las de él y él me abraza por la cintura. Con nuestros cuerpos encajando perfectamente. Levanto mi cabeza al sentir su mirada en mi, nos miramos a los ojos y el momento se siente tan íntimo que me quiero quedar así para siempre.
—¿En qué piensas?
—En ti, en si eres real.
—Lo soy.
—Y eso es lo mejor. —me besa lentamente para después separarnos.
Acomoda mi cabeza en su hombro, y dejo un beso en su cuello. Nos quedamos dormidos en esa posición.
———🍁🇮🇹🍁———
Hace muchoooo calor aquí.
Les debía este extra... No sé me olvidó jaja.
Estamos muy cerca de los 10k, así como del último extra... Creo.
