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Seguimiento del OS anterior de Tamaki. Leer nota del final.
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Vuelves, en cada sueño que tengo caigo de nuevo en tu red
Después de que Tamaki se fue, se aseguró de dormir a Eri de nuevo y verifico que todo estuviera correcto antes de irse a su habitación, también viendo así a su abuelo. Llegando a su habitación se echó a llorar se sentó en el suelo juntando sus rodillas.
~¿Hice algo mal?.- Se pregunto a si mismo aún recordando los chupetones que Amajiki tenía y después de que se quedó callado cuando le pregunto sobre la chica.- 5 años de relación a la basura, ¡Qué mierda!.- Se levantó y tiro todo lo que estaba a su alcance.
Hizo un estruendo pero todos estaban durmiendo profundamente, tiro las fotos al suelo, tiro cada cosa que hicieron al suelo se sentía realmente mal.- Pasamos tan lindos momentos y me hiciste esto, ¡Te odio!.- Dijo mirando aún cuadro que estaba colgado sobre su cama.
Tenía unas ganas terribles de gritar, sus lágrimas eran demasiadas, volvió a la posición inicial mirando así todos los recuerdos que tenía con el pelimorado, se sentía vacío sabiendo que ya terminaron su relación.- No fui suficiente para él, ¿No me amaba como decía?.- Miro al techo donde se encontraban unas bellas mariposas dibujadas.
Sé que tarda un tiempo curarme de ti de una vez
Se quedó toda la noche recordando cada cosa que hicieron juntos las miles de sonrisas que tuvieron, los miles de besos, las veces que se quedaban juntos por la noche recordando cada tontería que hacían. Las veces que solo se quedaban en silencio admirandose para luego terminar en una sesión de besos.
Eri solía estar con ellos en sus citas nocturnas en casa, le gustaba estar con ellos dos ya que solían jugar con ella y darle mimos, Eri quería mucho a Tamaki pero desde que dejó de ir a su hogar se sentía extraña al igual que Masahiko. La pequeña hacia cualquier cosa por querer ver a su hermano sonreír de nuevo pero este solo lloraba en silencio al ver el esfuerzo de la pequeña.