CUENTOS DE VILLANOS: SEGUNDA PARTE

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Ivy la cual se mantenía con la cabeza sobre sus hombros, escuchaba atenta al cuento que Hans le contaba, al terminar la blanquinegra soltó un largo y profundo suspiro y manteniendo la mirada sobre su huésped, y comenzó a imaginarse como la protagonista.

-Y ese fue el cuento de la bruja y el príncipe.- dijo el pelirrojo cerrando el libro y dejándolo sobre la mesa     

-Y Dime te gusto el cuento ?.- agrego Hans   

-Me gusto ver que la bruja haya conseguido el amor del príncipe y que fuera aceptada por todos.- contesto tiernamente la blanquinegra        

Fue entonces que la princesa regreso en si y tanto la alegría como la felicidad se apoderaron de ella, fue en ese instante que la mirada de ambos villanos chocaron, ante esto la blanquinegra rápidamente desvió su mirada, pues no quería arruinar aquel momento que ambos pasaban        

-Ahora es mi turno de leerte uno.- agrego Ivy incorporándose y tomando uno de los libros que había en la mesa  

El pelirrojo soltó una pequeña risa, pues nunca pensó que alguien le contaría un cuento de hadas,  pero al recordar lo que había aprendido en el castillo de Arendelle, el acepto gustoso

-Adelante.- dijo el ex príncipe con un tono dulce y mirando a la princesa   

Fue así que mostrando una sonrisa acomodo uno de sus mechones de cabello sobre una de sus orejas para después tomar el libro de cuentos, comenzó a hojearlo de forma lenta y al pasar las hojas llego hasta un cuento que quizá podría gustarte a Hans                                 

"Quizá le guste este" dijo la blanquinegra en su mente

-Bien este cuento se llama el corazón de un príncipe dijo ella para después comenzar a narrar el cuento

Comienza a narrar Ivy 

Hace mucho tiempo en un Reino existía un Joven príncipe, el cual poseía un negro corazón era muy atractivo y elegante, pero con terribles sentimientos. No era Rey pues para hacerlo debía casarse, por lo que los asuntos del estado estaban en manos del consejo de regencia, ante comenzaron a llegar cientos de pretendientes al castillo, pero al ver los terribles sentimientos y personalidad del príncipe las jóvenes pronto abandonaban el castillo, por lo que cientos de chicas iban y venían del castillo.

Al momento de presentar los retratos de las candidatas ante el príncipe y comenzar hablar de sus dotes, el joven, aburrido del mismo protocolo miraba con la cabeza inclinada sobre su mano y con voz firme hablaba.

-La Rubia es aburrida y la pelirroja es muy infantil.- decía el príncipe

Sin mas se levantaba de su trono para después dirigirse su habitación, ante su actitud muchos miraban con tristeza como el joven desechaba a la jóvenes mientras otros barrían con la mirada pues estaban cansados de la actitud del príncipe.

A diferencia del resto de los demás príncipes, el tenia grandes ambiciones, pues tenia planeado lanzar una fuerte campaña militar para volver el Reino a Imperio, añoraba ser Emperador por lo que tenia en la mira a ciertos reinos y ducados que eran pequeños y débiles y los cuales deseaba anexarse, pero su sueño no podría verlo realizado si no estaba casado tal y como lo estabulaba, la ley, por lo que sus sueños quedaban en el aire algo que lo hacia enfadar.

Hans, al escuchar como era el príncipe y la actitud que este poseía, no pudo evitar soltar una pequeña risita para que después una sonrisa se dibujara en su rostro, pues aquel personaje lo hacia recordar su pasado, por su parte la Blanquinegra seguía narrando el cuento y por breves momentos sus ojos lo miraban, Fue entonces que al ver su actitud una sonrisa maliciosa apareció en la mirada de Ivy.                         

Hans x Ivy : Yo quisiera serDonde viven las historias. Descúbrelo ahora