Señas

《 6 》

De aquella prueba solo pasaron los clanes más grandes, los demás se retiraron de inmediato del concurso y del palacio. Primer lugar el clan Lan, segundo lugar el clan Wen, tercer lugar el clan Jin y en cuarto lugar el clan Nie.

Al día siguiente tenían descanso, por lo que el príncipe se retiró al bosque detrás del palacio, en aquel que llamaba su "lugar secreto", allí desde pequeño iba siempre a descansar y librarse un poco de la rutina y aprovechaba el tiempo para tocar la flauta. Se subió al árbol mas grande de allí y se acostó con tranquilidad sobre una rama, apoyando su espalda en el tronco, mientras escuchaba los sonidos de la fauna silvestre. Había cerrado los ojos hasta que un ruido lo perturbó, subió ambos pies a la rama donde estaba sentado y se quedó en completo silencio, cuando entre los matorrales salió Lan Zhan, llevando con él un Guqin, "vaya...ahora mi lugar secreto, no es tan secreto" pensó y rio suavemente, no le molestaba compartir aquel lugar especial con tan bello invitado, así que se volvió a recostar y espero que tocara alguna melodía. La pieza musical que tocaba le dio una tranquilidad absoluta, era suave pero no lo suficiente para hacerlo dormir, luego de un tiempo notó un patrón e intentó imitarlo con su flauta, ambos retumbaban en el lugar, haciendo que todos los animales alrededor parecieran callarse solo para poder escucharlos

-¿No es de mala educación espiar a sus invitados majestad?- la voz gruesa de Lan Zhan hizo que cada poro de su piel se erizara y dejara de tocar rápidamente para sostenerse de la rama "¿como supo que estaba aquí?" Pensó mientras se asomaba a verlo sonrojado - por las vibraciones de la flauta - respondió como si hubiera leído sus pensamientos y él levantó la cabeza para encontrase con su mirada, sonriendo levemente

-¿Hace cuanto sabes que estoy aquí? - el príncipe se limitó a responder
Desde que llegué- confesó sin borrar su sonrisa, era claro que aunque no sabía que él estaría allí, su perfume lo había guiado hasta allí

-Entonces el que me está espiando eres tú - dijo divertido, soltando una suave risa. Lan Zhan se levantó y se quedó mirándolo

-Tal vez - le dijo ahora estirando sus brazos en dirección a él, el príncipe solo lo pensó unos segundos y decidió saltar a sus brazos

-Gracias - mencionó sonrojado mientras se aferraba al cuerpo ajeno, que lo acunaban con delicadeza, le respondió solo con un "Mm" y lo dejó delicadamente en el suelo. Caminaron juntos de vuelta al palacio - ¿Cómo se llama la melodía que estabas tocando?- le preguntó al llegar y él se tensó

-Te lo diré la próxima vez- le dijo ahora caminando un poco más rápido para entrar primero

-Mm...ahora estás seduciéndome - pensó en voz alta, sintiendo aquellas mariposas en su estómago revolotear sin parar y en su pecho aquella sensación tan calidad que solo él podría causar.

◇

De nuevo, era otra noche en la cual Lan Zhan no pudo conciliar el sueño, así que salió un poco mas temprano de su habitación recordando que en aquella hora mas o menos, había visto a la persona correr hacia la biblioteca y como suponía aquella persona se escabulló silenciosamente, él frunció el ceño y se acercó un poco más, "¿por que el príncipe estaría yendo a hurtadillas a la biblioteca a esas horas de la noche?" Pensaba mientras lo reconocía por sus movimientos y de nuevo lo ponía en evidencia su olor corporal.