HALF part 2

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"Algunos le temen al fuego, otros se convierten en fuego"

Era aquí el fuego enardecido y rabioso apoderándose celosamente de un corazón que ya era en su momento tan frágil como un débil cristal, el corazón de Dietfried temía por las acciones de Violet que le confundían hasta la medula. 

y para cuando Gilbert recupero la conciencia en una camilla de enfermería rodeado de vendajes, para cuando volteo a ver quien era la persona que le curaba las heridas y velaba por su salud, se dio cuenta que era ella, aquella de quien habia estado huyendo toda la vida. sus ojos comenzaron a dilatarse y  su cuerpo a temblar,  de su boca intentaba escapar un grito ahogado y con sus manos desesperadamente comenzó a rasgar los vendajes  sobre su pecho, mientras su cuerpo se retorcía y azotaba contra la camilla. Empujo a Violet con uno de sus pies y ella se azoto contra la pared cayendo atónita frente a él, las amas de casa y los mayordomos entraron a auxiliar  a Violet intentando en vano calmar a Gilbert. 

y creo que Violet jamás olvidara su mirada, la pupila oscurecida del mayor mirándola con desesperación, allí no habia nada mas que vergüenza y un montón de miedos, fundados e infundado miedos revoltijos de sentimientos vomitados desconsoladamente. 

"Ella es fuego y flores"

Y si, ella podía ser todo eso y mucho mas, era un desastre natural con energía abrasadora, eso de lo que no importa cuanto intentes jamás te puedes ocultar. Cuando llego la tarde con su manto anaranjado ella volvió a la habitación de Gilbert, dicen que habia tenido un ataque de pánico, se sentó al borde de la cama aun así para ella era prácticamente un sueño que después de tanto tiempo el siguiera vivo. 

la mano de Gilbert atrapo la mano de Violet  y en un susurro que como  toda la vida espero Gilbert le dijo " tus manos son muy frías", ella volvió la mirada hacia él, pero Gilbert evitaba fijar la mirada y encontrar sus ojos, pues si eso ocurría el fuego volvería a avivarse otra vez, quería a toda costa evitar  quedar atrapado en el universo de su mirada. 

Ella era pólvora 

¿Cómo silenciar aquello que desde tus entrañas todo cuerpo clama?, era inevitable.... pronto el diagnostico de la enfermedad del mayor salió a la luz con nuevos tratamientos que daban algo de esperanza, tuberculosis, era una enfermedad común en la guerra y entre soldados.  pero la enfermedad incurable que le aquejaba era una que se desato el primer día que cruzaron miradas. 

Violet aun estaba descifrando sus sentimientos, habia encontrado un nido en un lugar totalmente inesperado y ahora aparecía aquello de lo que ella jamás se puso deshacer. 

dicen que cuando tienes un vinculo con una persona como un hilo rojo jamás se puede deshacer, sin importar a donde vayas,  o cuantas veces intentes cortarlo, no se puede romper. 

aquella joya resplandeciente recuerdo inaudible de los ojos de Gibert, la estrella cegadora de violet, aquello a lo que ella habia encadenado su infancia por obediencia, esa que ella sin saberlo Gilbert  creía que cargaba como un bendito castigo. 

amarla a penumbras y a espaldas de ella, roto y quebradizo corazón suyo carcomido por gusanos de amor hasta la mas insensata célula, destruidas sus manos que indecorosamente a veces  osaban con una caricia rozar los dedos de Violet y atraparse en una breve y eterna ilusión. 

una ilusión en la que jamás sus caminos se cruzan como esclavos de la guerra, donde los cielos no se tiñen de pólvora  y los ríos corren colorados de  sangre inocente.  

las puertas se abren de pronto, Dietfried entra estrepitosamente  a la habitación percatándose sigilosamente de los dedos de Gilbert escabulléndose por las sabanas por entre los dedos de Violet convenciendo a su cabeza " no es amor" 

y tal vez el corazón de nuestra pequeña aventurera  este dividida entre dos tan diferentes amores..... 


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