17

380 72 4
                                    

[♡] Díganme si hay algún error ortográfico, gracias <3

Wooyoung seguía siendo lejano a los demás, pero había aprendido a acercarse a San.

Y San, había aprendido muchos gestos de Wooyoung. Lo conocía muy bien.

Cuando Wooyoung se enojaba o estaba cansado, hacia un tierno puchero.

Cuando comía o sonreía, los hoyuelos de sus mejillas se marcaban mucho.

Y sobretodo, que amaba su sonrisa. Era el gesto más sincero que había visto en el menor. Cuando estaba feliz, irradiaba luz por todo sus poros.

Wooyoung era un sol.

Pero un sol de invierno.

Porque estaba ahí brillando, pero aún no podía entregar su calor y luz a todo el mundo.

Era un sol para pingüinos.

San notó con el tiempo que estaba pasando de estatura a Wooyoung. Ahora el de cabellos oscuros le gustaba molestar a San por lo grande que era.

Pero el mayor no le diría nada, porque amaba que Wooyoung estuviera feliz.

Las tardes juntos le alegraban el alma, y agradecía la idea de su madre de que ambos fueran amigos desde pequeños.

Pero había algo que San no había visto hasta un día. Algo que había pasado desapercibido ante su intelecto por todos aquellos años.

Ese algo, era que Wooyoung le tenía miedo a una persona en específico.

Y cuando San lo descubrió, supo de inmediato que desde ahí venía su trauma.

28-05-21

𖥻 ˒ 3/10

Pasitos de pingüino【‹𝟹】Woosan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora