Where are you?

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- ¿Quieres un café?

Pero Chris solo miraba atónito a Leon sosteniendo una taza vacía. Una mirada cotidiana en un día cotidiano.

Aun seguía haciéndose la misma pregunta y buscando explicaciones que no existían en su memoria.

Chris vio a Leon morir. Observo como Miranda atravesó su corazón y le dejo desangrándose en esa misión de reconocimiento en Rumania. Un pestañeo, y todo se había derrumbado ante sus ojos, dejándolo con la única opción de huir de las bestias que lo perseguían por el campo. Aun sentía la culpa y la tristeza recorrer su cuerpo al no poder hacer nada para salvarlo.

Pero Leon solo lo veía confundido y con condescendencia.

No era fácil para ambos... El superar ese momento.

- ¿Chris... estas bien? - aun así, Leon no quería tocar el tema. Solo podía recordar haber despertado en medio de ese campo, con frio y la vista borrosa... moribundo, pero vivo. En carne propia, hasta que el escuadrón de Hound Wolf lo encontró para curar sus heridas y llevarlo de nuevo a el cuartel. Todo había pasado tan rápido.

- Si... estoy bien. - sus manos temblaban. Estaba al borde de un colapso nervioso.

La imagen de su novio desangrándose en el el pastizal, la risa de Miranda... Los gritos de dolor que aun estaban presentes en su mente, lo estaban volviendo loco.

Leon lo sabia. Pero prefería sonreír, mantener la calma y aparentar que nada de lo que había pasado había sido grave. Y era lo que hacia ahora.

Sonreía, sosteniendo su taza de café, tomando asiento frente a su novio y dejando que el silencio llenara la habitación. Era lo único que podían hacer, lo único que su rota vida les dejaba hacer.

Con el tiempo... comenzó la distancia. Chris no podía soportarlo, eran demasiados recuerdos, era traumático y difícil de explicarlo a un psicólogo o psiquiatra de la BSAA. Así que comenzó a beber de nuevo. Solo eso podía hacer para acallar las memorias y la culpa de no haber salvado a su novio de haber muerto en ese campo.

A veces, cuando ambos dormían juntos, Chris tocaba la piel de Leon, tocaba su cuello y muñecas solo para sentir su pulso y asegurarse de que no esta viviendo al lado de un fantasma que había llegado para atormentarlo con recuerdos dolorosos... pero no, era el, en carne propia y sano... Vivo.

Su novio estaba vivo y aun lo amaba. Aun después de todo.

Leon era otra historia. La frialdad de Chris, no estaba ayudando a su frágil estabilidad. Quería abrazarlo, decirle que estaba bien, que no había sido su culpa y dejara de buscar explicaciones en el pasado y se concentrara en el presente. Quería decirle cuanto lo amaba, pero era imposible, porque eso tenia implicaciones.

Implicaba revivir el dolor de morir... o ¿Casi morir? Se sentía como un muerto viviente, como los que habían enfrentado durante años ¿Seria como uno de ellos?

El sentía las manos de Chris tomar su pulso durante la noche.

Pero no las alejaba, porque era la única forma en la que el lo tocaba desde... bueno el incidente.

Aunque no todo era culpa de Chris...

Recordaba una ocasión en la que el estaba cocinando. Era una tarde tranquila, en sliencio, hasta que Chris intento abrazarlo. El agente estaba de espaldas y eso lo tomo por sorpresa. No sabe si fue la impresión, su entrenamiento militar o el recuerdo de Rumania lo que hizo que reaccionara por instinto y golpeara al mayor, apartándolo para apuntarle con un cuchillo a manera de defensa. Su respiración era agitada, sentía que su corazón iba a salirse de su pecho y tardo en reaccionar y entender que era lo que había hecho.

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⏰ Última actualización: May 28, 2021 ⏰

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