Our History|Chris X Leon| | Resident evil one shots|

Fighter

La campana del ring puso en alerta todos los sentidos del luchador que estaba sobre el y que era observado por el chico de cabello rubio ceniza y preocupados ojos azules.

La pelea era reñida y claramente el hombre de los guantes azules no era precisamente el favorito, las apuestas favorecían al contrincante y, para colmo, tampoco era local. Pero tenia que esforzarse... tenia que demostrarle que podía con esto...

Que no importaba cuantos golpes recibiera, era mas fuerte que todos ellos.

Y por el seria fuerte, solo por el.

Un puñetazo al rostro, un gancho a las costillas, y el ultimo que debía ir a las rodillas fue esquivado para que Chris pudiera responder con una serie de puñetazos al hombre frente a el.

Leon solo mordía su uña con desesperación... jamas le gusto que el hombre que amaba fuera un luchador. Sin embargo, ¿como no apoyarlo?

Para el, la mano que era levantada no era importante... Chris siempre era el ganador en su corazón.

Esta era la pelea de su vida, habían logrado conseguir una estelar, y aunque aun no era de las grandes categorías, no dejaba de ser importante para el.

Los puños de Chris se movían con rapidez y precisión que hacían ver como si no tocara a su adversario, como si solo fueran roces... pero esa era la técnica especial que su padre le había enseñado.

Habia sido uno de los mejores luchadores que había entrenado en su gimnasio antes que falleciera y pasara a manos de su único hijo, Leon.

Su padre había sido un boxeador que con su esfuerzo, compro un gimnasio para entrenar a novatos, incluso sacar a algunos de las calles, sabia lo que hacia, era experto en técnicas y rutinas de alto rendimiento.

Un día, Chris entro por la puerta para pedirle una oportunidad, que lo entrenara para las peleas callejeras y así tal vez podría llegar a las grandes ligas.

Le enseño todo lo que pudo, eh incluso más, pasaba mas tiempo con el que en casa y era mucho decir, ya que el padre de Leon y el vivían en el gimnasio.

Y fue asi como poco a poco se enamoro del amable luchador que le sonreía mientras entrenaba, hablaba con el cuando volvía de la preparatoria y cenaba con ambos Kennedy para que su padre pudiera controlar la dieta de Chris.

Eran su segunda familia.

Lamentablemente, su entrenador no pudo acompañarlo en su primera contienda.

Ese sábado en la noche, durante la ultima pelea estelar de su entrenador, ocurrió algo impensable.El contrincante era un novato, seguro, pero era rápido y no tenia piedad. Leon jamas había visto una técnica así. Thomas Kennedy estaba exhausto, y el round parecía eterno. Pero el no dejaba de repetirse que estaba bien, todo estaría bien, su padre era fuerte y un gran boxeador. Todo estaría bien.

Pero no lo estaba en absoluto.

Justo a la mitad del quinto round, Thomas recibió un uppercut que le dejaría en la lona, inconsciente. El publico estaba eufórico. El campeón había sido derrotado en la primera pelea importante de un desconocido con suerte. Y mientras los demás celebraban, Leon fue el único que se percato de que su padre no estaba respirando, ademas de la sangre que había comenzado a derramarse en la lona.

Jamas escucho la maldita campana.

La primera campana que indicaba que el primer round había terminado sonó en medio de toda la conmoción, ambos peleadores fueron separados por el mediador y llevados a sus esquinas, Chris estaba cansado pero no lo suficiente, aun podía continuar.