𝔼𝐬𝐭𝐫𝐨𝐩𝐞𝐚𝐫𝐥𝐨

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Mirarle a veces era complicado, doloroso

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Mirarle a veces era complicado, doloroso.
A veces no lo soportaba, a veces era un dolor tan... Grande, que sólo podía marcharse de donde estuviesen para irse a su habitación.

A veces les veía reír y se alegraba por su felicidad, en serio.
Solo deseaba que aquel tierno tiburoncín fuera feliz, aunque no fuese a su lado, solo quería verle...
Bien.

El mundo se iluminaba cada vez que sonreía, una luz brillante, amarilla, cegadora pero satisfactoria.

Pero esa luz se transformaba en oscuridad cuando sonreía por ella, cuando reía por ella, cuando toda su felicidad se basaba en esa chica.

Dolía, dolía mil horrores no poder hacerle feliz como antes...

Pero es que Eijiro no le amaba a él.
Y tenía que aprender a aceptarlo.

Miró como el pelirrojo le daba un beso a la chica, seguidamente revolviendo sus rizos rosaceos mientras esta reía y le daba un beso en los labios, abrazándole

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Miró como el pelirrojo le daba un beso a la chica, seguidamente revolviendo sus rizos rosaceos mientras esta reía y le daba un beso en los labios, abrazándole.

Desde que habían decidido hacerse pareja supuestamente nada había cambiado.
Supuestamente.

Kirishima ya no iba tanto con el grupo, Mina se arreglaba más que de costumbre y la actitud de ambos había cambiado.
Ya no podían hablar de cualquier chica de cualquier forma con Eijiro solo porque tenía novia, y no solo eso.

Denki le quería, y quererle dolía muchísimo.
No ser correspondido era doloroso, y no es que no tuviera opciones, porque las tenía.
Jiro ya le había pedido salir, podría haberla aceptado...
Pero no lo había hecho.

Sí, de acuerdo, no podía obligar al pelirrojo a amarle de esa forma, pero solo pedía que no fueran tan cariñosos frente a él, era incómodo.

Agh, lo odiaba.

Hasta que en mitad de clase le llegó un mensaje del chico, diciéndole que debían hablar.
Sin dudarlo medio segundo, el rubio aceptó, diciéndole que quedarían en el exterior de los dormitorios, junto a la puerta principal.

Estaba emocionado, hacía ya mucho tiempo que no pasaba un rato a solas con el ojirrojo, estar con él iba a ser... Maravilloso.

Pensó durante todo el día en clases en él, pintó su nombre en su cuaderno y montó escenarios en su cabeza que sabía que jamás iban a existir, aunque aún así los hacía.

𝕂𝐢𝐫𝐢𝐤𝐚𝐦𝐢 𝕆𝐧𝐞-𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬..•••☾︎❤︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora