Al borde del precipicio

Capítulo 26

Notas: Lamento la demora y lo corto de este capítulo, pero estoy pasando por algunos problemas familiares y laborales, así que no he tenido mucho tiempo para escribir, prometo actualizar más rápido a partir de ahora.

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-Adiós papá, espero que seas feliz sin mi aquí.

Después se acercó a Gerard que lo miraba con una sonrisa triunfal en su rostro y lo siguió hasta la camioneta, donde se subió en silencio, el resto de los cazadores regresaron a sus propias camionetas cumpliendo la palabra de su líder de no dañar a Derek o al sheriff. Derek seguía gritando su nombre cuando partieron, sin embargo, no miró atrás.

...

Pov Stiles

Llevaban cerca de 4 horas manejando a toda velocidad y estaba seguro de que ya no se encontraban en california, aunque no tenía como saberlo ya que una vez que se subió a la camioneta junto a Gerard, esposaron sus manos y vendaron sus ojos, solo era consciente del tiempo porque había contado en silencio durante todo el camino. Al principio intento contar los giros y vueltas para determinar el lugar donde lo llevaban, pero después de la primera hora se dio por vencido, no tenía idea donde lo llevaban, en lo que a él le concierne podrían estar sacándolo del país y no tendría como saberlo.

El tiempo seguía pasando y se alejaba cada vez más de Beacon Hills, aún podía escuchar los gritos de Derek en su cabeza y saborear su primer y último beso, haciendo que le doliera el pecho de solo recordar. Por fin tenía una razón para luchar y un lugar el cual regresar, pero si bien le prometió a Derek volver, no estaba seguro si lo lograría o cuanto tiempo demoraría en solucionar su actual problema y no había garantías de que el lobo lo esperara, después de todo, él mismo le pidió que fuera feliz y si eso era al lado de alguien más no tenía más remedio que aceptarlo.

Por fin se detuvieron en algún lugar y lo bajaron de la camioneta, arrastrándolo por ambos brazos al interior de un edificio. Seguía con los ojos vendados, así que solo pudo asumir que se trataba de algún almacén. Se podía escuchar ruido de gente, gritos y el sonido armas y la voz de Gerard por sobre todos los sonidos ladrando ordenes que él no se detuvo a escuchar, estaba demasiado asustado pensando en lo que le harían, como para preocuparse por las ordenes de un viejo psicópata. Estaba por soltar algún comentario ingenioso al respecto cuando sintió un cambio en el piso que lo hiso tropezar, antes de caer, tiraron sus brazos para estabilizarlo y lo jalaron hacía abajo por las escaleras.

Bajaron cerca de 4 pisos cuando por fin lo soltaron y quitaron la venda de sus ojos, la luz pareció segarlo por unos segundos hasta que se pudo adaptar lo suficiente como para distinguir que se encontraba en una pequeña pieza con una cama en la esquina, una silla y lo que parecía ser una cuarto de baño, no había ventanas ya que claramente estaban bajo tierra y la única salida consistía en una pesada puerta de hierro con una pequeña ventana con barrotes. Estaba observando todo con detenimiento cuando Gerard hablo.

-Muy bien mocoso, bienvenido a tu nuevo hogar...soltó con burla, antes de hacer un gesto con la cabeza a los 2 matones que lo acompañaban, los cuales los afirmaron de los brazos fuertemente, mientras Gerard se acercaba con un extraño collar negro que tenía una pequeña luz roja que parpadeaba en el costado. Una vez que ajustó el collar en el cuello de Stiles, pudo notar que era de cuero grueso y resistente.

-Qué es esto...preguntó Stiles con cautela.

-No te preocupes es solo un seguro, pero será mejor que mientras lo lleves no hagas nada estúpido.

Gerard volvió a hacer un gesto uno de los matones para que quitaran las esposas.

-Tienes ropa encima de la cama, en 1 hora vendrá alguien a llevarse la que tienes puesta, más tarde comenzaremos con las pruebas y el entrenamiento.