玉:(TREINTA'Y'TRES)三十三

232 39 72
                                    

—Imaginé que vendrían pronto, me ahorran el trabajo de ir a buscarlos. —Wooseok se cruzó de brazos frente a la puerta de la casa—

Jinhyuk jamás pensó que llegaría el día en que se sentiría incómodo por reunirse con Wooseok, pero muchas cosas habían ocurrido hace más de un mes, y la última vez que se vieron se separaron de una forma muy desagradable. Todavía no se acostumbraba al Wooseok que se le oponía, así que aún no sabía cómo actuar bajo la mirada frívola y amenazante del castaño.

Abrió la boca en un intento por decir algo, pero sus pensamientos estaban tan enredados que solo pudo soltar bufidos sin sentido. Ni siquiera sabía si estaba enojado, o preocupado o avergonzado. Ni siquiera sabía por qué insistió en venir con su Madre.

Era un hecho que no tenía palabras que decirle a Wooseok.

—Wooseok...

El mencionado tenía una expresión fría incluso para la señora Lee, luciendo más como el Mariscal Kim al que todos temían.

Wooseok bajó los escalones, avanzando un par de metros, pero aún manteniendo cierta distancia con los indeseables visitantes.

Los intensos ojos dorados se posaron sobre el Alfa más joven de los presentes.

—Han Seungwoo, qué imprudente eres al presentarte aquí. No sabes en qué tipo de situación nos has puesto, estoy teniendo un momento difícil para contenerme, pero te aseguro que te mostraré el infierno si te atreves a decir o actuar inadecuadamente una vez más.

Seungwoo frunció las cejas, y antes de que pudiera replicar, su Padre lo tiró del brazo para que retrocediera, y dijo;

—Wooseok, entendemos tu hostilidad, pero no hemos venido a luchar contigo, no es necesario que te prepares para una matanza.

El Alfa Han se encontraba bastante conmocionado, pues Wooseok había activado sus matrices ofensivas abiertamente sin siquiera intentar disimularlo, como una clara amenaza que anunciaba que no estaba para juegos.

Si antes no hubiese tirado del brazo de Seungwoo y éste hubiera avanzando hacia Wooseok, seguramente habría sufrido heridas graves.

Wooseok se miró los guantes de cuero con actitud desdeñosa.

—Señor Han, no intente jugar el papel del agraviado, porque si mal no recuerdo, todos ustedes intentaron sacrificar a Seungyoun, y nada me asegura que no han venido precisamente a eso.

—Tienes razón, no tienes motivos para pensar que no hemos venido a perjudicarte, pero---

—Si tienes algo que decir, dilo. Como ves, no te invitaré a una fiesta del té para aliviar las perezas. Y por supuesto, cualquiera que intente entrar a la fuerza, no gozará de una buena salud durante un largo tiempo.

Las personas siendo amenazadas directamente no se trataban de gente de poca importancia; eran dos Alfas líderes de las manadas más importantes del país, el heredero de una de ellas, y la Madre de uno de los Alfas. Para atreverse a pronunciar tales palabras, solo se podía ser muy estúpido o muy fuerte.

Como Alfas de grandes manadas, tanto como Jinhyuk como el señor Han no podían evitar el malestar que les provocaba ser amenazados de esta forma, incluso si se trataba de Kim Wooseok.

Seungwoo aún era joven, y su molestia no provenía directamente de la amenaza, sino de los motivos que la impulsaban.

Wooseok era un Omega, pero era diferente de los demás. La voz de un Alfa jamás llegaría a intimidarle, especialmente ahora que había encontrado a su pareja. Por lo que si las cosas seguían así, sería natural que una pelea diera comienzo.

JADE (SeungSeok)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora