Forbidden Love

Capítulo 16 -Nervios

Apenas llegué me tiré en la cama, odiaba pelear con Matías pero esta discusión había sido la más fuerte de todas y no quería perderlo por idiota.
Agarré el celular y me puse a ver las fotos de anoche, encontré una con él que me encantó así que decidí subirla a mi feed de Instagram, no solía subir fotos al feed con otras personas.
"Te amo❤" puse en la descripción y luego entré en el chat de Thiago para responderle:
@Thiagoespíndola -Hola linda, perdón que no te hablé antes, llegaste bien?
@Thiagoespíndola -Creo que estás de joda por lo que vi en tu historia, cuidate❤
@Romii_Fernandezz -Hola, no me digas linda Thiago, tengo novio
{Thiago}
Su respuesta me dejó shockeado, nunca me había escrito de forma tan fría, decidí no contestarle y dejar el celular.
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{Romina}
Los días pasaron, al igual que mi enojo con Matías y también con Thiago. No había hablado más con ninguno de los, lo cual me estaba torturando.
Dejé un poco mi orgullo de lado y le escribí a Thiago para arreglar las cosas:
{Chat}
Romi -Hola...-
Romi -Creo que te debo una disculpa por haberte respondido tan mal-
Romi -Entiendo si no aguantas más mis caprichos-
Thiago -Roo-
Thiago -Obvio que si, te extraño-
Romi -Yo también te extraño, mucho-
Thiago -Querés venir a casa? Así hablamos bien-
Pegué un salto de la emoción, por supuesto que le dije que si, me arreglé y fui lo más rápido que pude hasta allí.
{Thiago}
La esperé en la entrada del barrio al igual que la vez anterior.
Cuando la vi llegar, tan preciosa, con su pelo suelto, un short y una remera cortita que permitía ver parte de su ombligo, era una de las chicas más hermosas que vi en mi vida. Llegó a mi y nos abrazamos, la extrañaba y creo que ella a mi también.
Caminamos en silencio hasta mi casa, donde pasamos y le dije que se siente en el sillón si quería y eso hizo, mientras que yo fui a buscar algo para tomar a la cocina.
-¿Cómo estás? Extrañaba verte ya- le dije sentándome a su lado.
Le alcancé un vaso con Coca Cola y me quedé otro yo.
-Yy... ahí ando- agachó la cabeza, triste, me preocupó eso.
-¿Qué pasó?-
-Discuti con Matías, pero esta vez más en serio-
-Uuh que garrón, pero bueno, ya se van a arreglar-
-Si, no se, espero- tomé su pera suavemente y la levanté para que me mire a los ojos, mientras la acariciaba despacito.
-Ya va a estar todo bien, no quiero verte mal eu- le dije en voz baja y luego la abracé.
{Romina}
Cuando me abrazó fue como si hubiera abrazado al vaso de vidrio que tenía en mi mano y no a mi, quebré.
-Ay no... no llores- me dijo al escuchar mi llanto y me secó las lágrimas con sus pulgares, acariciándome -¿Dónde está la Romi que yo conocí, eh? La que se ríe por todo, que siempre está con una sonrisa-
Sus palabras me hicieron largar una mini sonrisa, y él me la devolvió, pero ahora mirándome la boca.
-Así me gusta- me dijo despacio y me sacó el vaso de la mano, dejándolo en la mesa ratonera que estaba al lado nuestro, donde también dejó el de él -Ahora vení acá...- me hizo una sonrisa pícara y se abalanzó sobre mí. Me empezó a hacer cosquillas en la panza y por todo el cuerpo, obviamente haciéndome reír a lo loca.
{Thiago}
Estaba encima de ella haciéndole cosquillas, me ponía un poco nervioso la posición, ya que nuestros cuerpos estaban muy juntos, realmente no suelo ponerme ponerme nervioso por esas cosas. Pero ya les dije que con ella era distinto, me encantaba verla reírse, así que seguí, dejando de lado los nervios.
Frené de golpe al ver que ya lloraba de la risa y me quedé mirándola.
-Sos hermosa- susurré embobado.