Demonio con cara de ángel.

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Moscú, Rusia
Martes en casa de Deniska

Un fuerte golpe en el rostro hizo que me despertara: adivinen... ¡Si! El brazo de mi hermano cayó encima de mi cara, me sonó la nariz que es donde me pegó, me fijo en el reloj alado de su cama, son las cinco y media.

Cierro los ojos y apartó a mi hermano, intento volver a dormir pero no puedo, riendo por la cama pero es imposible volver a dormirme, me levanto de con suavidad de la cama, no despierto a mi hermano por qué dijo que tendría cosas que hacer con el equipo hoy, salgo de la habitación.

El frío me envuelve por haber salido de las sábanas tibias, una vez fuera de la habitación voy a ver si mis padres ya llegaron, me acerco a su habitación y al escuchar sus suaves ronquidos me doy cuenta que ya están aquí.

Me acuesto en mi cama, como tampoco puedo dormir decidí levantarme a buscar la ropa que usaré hoy: Una camisa negra bastante grande de color negro (casi gris) tiene un estampado de ¿Loney toons? (Creo) un pantalón de mezclilla gris, desgastado y con aberturas en las rodillas, tomo unos bóxers negros, no tomo sostén, la camisa es grande así que tal vez no se noten mis pezones, y si se notan, no hay problema, el algo natural.

Después de elegir mi ropa me quitó la pijama y entro a darme una ducha

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Después de elegir mi ropa me quitó la pijama y entro a darme una ducha. Al salir me envuelvo con una bata y una toalla en el cabello, me seco el cabello, lo aliso.

Cuando me visto, punto mis labios de la forma en que siempre lo hago, pongo rimel en mis pestañas, delineado simple (una colita).

Me siento en la orilla de mi cama viendo que ya son las seis con veinte minutos. Me levanto y voy a avisarle a mi hermano que ya despierte, lo encuentro ya preparándose.

-Buenos días hija. ¿Te caiste de la cama?- pregunta mi madre de forma divertida.

-Buenos días mamá. No, no me cai de la cama, un brazo me aplasto la cara- contesto riendo en dirección a mi hermano que viene entrando, este se ríe inocentemente.

-Buenos días ma- saluda mi hermano, besa la frente de mi madre y se sienta en la mesa de la cocina.

Desayunamos entre pláticas, papá se nos unio, al terminar de desayunar ayudé a mamá a lavar los platos, papá salió minutos después con su portafolio en mano, mamá tomo su bolso y lo puso en la mesa.

-Hijos, cuando vuelvan del instituto probablemente ya nos hallamos ido, nuestro vuelo sale a las... Bueno sale antes de que ustedes regresen- aviso papá mientras miraba su reloj

-Esta bien papá, los veremos... ¿El domingo?- pregunto para ver si acertó, según se, durarán cuatro días y hoy es martes.

-El domingo por la noche- asegura mamá

-Esta bien ma- responde mi hermano

-Cuida a tu hermana, chamaco del demonio- dice mi madre de forma juguetona, le da una nalgada a mi hermano y sonríe tiernamente.

Jugador de FútbolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora