Him [EN CURSO]

Capítulo 19

*Una semana después*

EMMA

Era el segundo día consecutivo que me despertaba en el hospital, siempre con Ingrid, Abril y  Marc al rededor de mi cama o dando vueltas por la habitación y ayer vinieron  Maya y Blake, pero Maya se fue pronto porque tenia que cuidar de su prima.
La verdad que no me acuerdo de nada de lo que me ha pasado, ni siquiera de como he acabado aquí, se porque, pero no se cuando ni como, pero Abril me lo ha contado todo, y si obviamente es por la anorexia.

Abril me conto que la semana que lo deje con Jer, comía menos, y todo lo que comía después lo vomitaba, a veces me mareaba...

Esto me pasa cuando el cariño que tenia con una persona desaparece o no recibo ese tipo de cariño constantemente como solía. Me paso con mi padre, me mejore luego pensé en mi ex y mis "amigas" de Ohio y empeore, y ahora me pasa por culpa de Jer.
Pero no podía permitirlo, no podía permitir que me vean romperme, no podía permitir que sepan que no era del todo fuerte.

Lo bueno de estar en el hospital ingresada, si había algo bueno claro, era los momentos que podía tener sola, estar sola con mis pensamientos.
Leer mientras escucho música, ver una peli o unos cuantos capítulos de la serie que estoy viendo "Por Trece Razones" y por ultimo y lo que mas me gustaba, escribir en mi diario. Ese era el orden, todas la noches cuando mi familia y amigos se iban y me quedaba sola y hacia todo eso hasta alguna alta hora de la madrugada.

Ahora estaba leyendo un libro en digital, porque el de "Nosotros en la Luna" de Alice Kellen me lo había acabado ya. Estaba leyendo uno libro llamado "Una constelación mas" de una chica llamada Leah Gutierrez. En dos noches ya me lo estoy acabando, es un libro super adictivo, y la autora escribe super bien, parece profesional, para la edad que tiene.

Cuando pare de leer, cogí mi diario, un boli y me senté al lado de la ventana. No debería levantarme, porque me han dicho que debo de estar en reposo durante tres o cuatro días. Pero siempre, todas las noches me voy a el sillón que esta al lado de la ventana.

Ese es mi sitio favorito de toda la habitación, por el simple hecho de que se ve la luna perfectamente.
Mirar la luna, es uno de  los momentos favoritos del día, puedo estar horas mirando la luna hasta que desaparece. La luna a mi me sirve como de terapia, me relaja y me ayuda a concentrarme, adoro mirarla, sobre todo cuando esta llena.

- Esta preciosa la luna hoy  - di un brinco del susto - lo siento - dijo entre risas. Suspire.

- Me has asustado, pensé que eras alguna enfermera - dije aliviada - ¿que haces aqui? - pregunte frunciendo el ceño.

- Nada, venia a ver que tal estas.

- Bien - sonreí - pero, ¿Cómo has entrado? si no se puede quedar nadie por la noche.

- Encima que te doy una sorpresa - hizo una pausa - ¿quieres que me vaya?

- ¿Que? claro que no Blake. Quédate, no me importa, mientras te vayas pronto para que no nos llamen la atención - asintió y se sentó en la cama de enfrente del sillón.

Hubo un buen rato que nos quedamos en silencio, pero era un silencio reconfortante, para nada incomodo. Yo mirando la luna y Blake mirándome a mi.

- ¿Ósea qué te gusta mirar la luna? - pregunto

- ¿No es obvio? - dije soltando una risa

- Si, si que lo es - respondió sonriendo - ¿quieres que vayamos a la azotea?

- No se si deberíamos, ¿y si nos pillan? - pregunte nerviosa.

- Tranquila cargare con la culpa - dijo a la vez que me levantaba del sillón con cuidado.