Mamá es famosa ☻ [gatos incluidos]

17. El príncipe Hamlet.

Taylor.

El sol estaba en su máximo punto a las 7:00 AM en rhode island, para mi suerte, el frío se había esfumado siendo remplazado por un caluroso - pero hermoso clima. Normalmente el calor molesta a las personas y no sé exactamente porque, bueno tal vez porque yo siempre he vivido en lugares fríos o no demasiado calurosos.

- ¿iremos a la playa? - preguntó james, jugando con el cereal de su plato azul favorito.

- si, la playa está cerca de todos modos - dije mirándolo desde donde me encontraba lavando los platos, que no eran más que dos.

- ¿vas a jugar conmigo?

- por supuesto - asentí sonriendo y una pequeña sonrisa se formó en su pequeño rostro.

Justo después de terminar el "desayuno" subimos a cambiarnos. nuestras pijamas fueron remplazadas por trajes de baño. Yo como fiel seguidora de lo clásico me puse un bikini rojo con círculos blancos. James por otra parte usó uno de max steel, al parecer él tenía un tipo de obsesión con ese muñeco, lo llevaba a todas partes, y las últimas tres prendas de ropa que había comprado traían un estampado con ese muñeco.

Tal vez era como cuando yo era una niña y tenía una pequeña obsesión con cenicienta, hacía que mi madre me leyera la historia todas las noches sin importar lo aburrida que ella estuviera de leermela, quería una hada madrina y me gustaba cantarle a los animales como ella lo hacía. también creía que cuando fuera grande como ella, conseguría un príncipe y todo eso, pero definitivamente no pasó, crecí y me di cuenta de que los cuentos de hadas y princesas eran sólo eso; cuentos de hadas y princesas.

***

- ¡mami, eres muy mala en esto! ¡sólo estas empeorando todo! - james me miró preocupado desde su lado de el "castillo" de arena (intento de castillo, diría yo).

- oh, ¿en serio crees eso? - pregunté abriendo la boca en forma de "o", claramente ofendida.

- sip - asintió.

Segundos después de que asintiera me acerque hacia él lentamente y comencé a hacerle cosquillas en el estómago, causando muchas carcajadas de su parte. sabía que si le hacía cosquillas él comenzaría a reir y a pedirme que parara.

- ¿aún lo crees? - me burlé aún sin dejar de hacerle cosquillas.

- ¡no! ¡no! sólo déjame - gritó riendo también e intentando quitar mis manos de su estómago.

- mm - murmuré "pensativa" - veamos..te dejaré si admites que soy la mejor en esto.

- ¡eres la mejor en esto!

- y te amo mucho - dije intentando parar de reír.

- ¡y te amo mucho! - repitió gritando casi inaudible a causa de la risa.

- ya está - dije quitando mis manos de su estómago - ahora vamos a intentar que esto luzca como un castillo real, porque realmente soy muy mala.

Continúe recogiendo arena, acomodandola e intentando darle forma de manera que luciera como un castillo, no construía castillos de arena desde que tenía 5 así que era algo comprensible. Y cuando tenía 5 años era bastante mala también, siempre he sido muy torpe en esta clase de situaciones. una vez papá y mamá nos llevaron de vacaciones a florida, austin estaba construyendo su castillo mientras yo me revolcaba en la arena como un perrito (era una niña muy sucia), él pidió ayuda y yo enseguida me levante como voluntaria puesto que no tenia nada que hacer, me había dicho que lo ayudara colocando más arena en la parte superior y terminé derrumbando todo, desde entonces austin me tiene un poco de odio cada que vamos a una playa.