Mamá es famosa ☻ [gatos incluidos]

6. No quiero que te vayas.

Taylor.

—Fifa es mejor. —le decía Bruno a James.

— ¿Es sobre soccer? — preguntó él.

—Sip.

— ¿Soccer es como el fútbol? — pregunte yo intentando entrar en la conversación. Era mi último día antes de iniciar el tour. Y aquí estaba, en una tienda de videojuegos escuchando debates de bruno y james sobre cuál era el mejor videojuego.

— Sí. —respondió bruno sonriendo.

— ¿Así qué es un deporte? — pregunte yo poco convencida. Me sentía sumamente idiota por no saber nada respecto al tema.

—Claro que lo es-. — respondió james rodando los ojos y dirigiéndome la mirada de "eso es lo más obvio del mundo".

—Lo siento, no soy muy buena en esto. —admití molesta.

—Lo sé. —dijo él girando hacia los estantes donde estaban millones de cajitas con sus respectivos títulos.

—Sólo te voy a comprar un juego, así que elige bien.

— Videojuego. —corrigió james.

—Eso. —dije yo rodando los ojos.

James pasó los siguientes 15 minutos mirando hacia los estantes y esto empezaba a ser desesperante, además de que yo odiaba los videojuegos. Yo no era una chica a la que se le pudiera considerar inteligente pero podía entablar conversaciones de distintos temas; menos sobre videojuegos, por supuesto.

—Llevare este. —dijo entregándome una caja con un chico uniformado como portada.

— ¿Seguro? —pregunte mirando insegura la cajita. Yo no era buena en esto pero sabía la clase de videojuegos que él jugaba, que eran dibujos animados, y esto no era para nada un dibujo animado.

—Sip, Bruno dice que es el mejor. —dijo sonriendo.

—Oh, está bien. Vamos. —dije tomándolo de la mano, y caminando hacia la caja.

Después de pagar, salimos de la tienda. Teníamos hambre así que fuimos a una cafetería, yo pedí un café igual que bruno, y james un par de muffins.

—Así que no sabes que es el soccer. — dijo bruno riendo.

—Pensaba que era un videojuego. —dijo james riéndose de mí.

—No, no lo sé. Y estoy orgullosa de ello. —dije defendiéndome.

—Mira, es un deporte, no se sí has visto ese juego donde hay un balón y lo pateas hacia la portería y entonces gritas '¡gol!' si este entra, todo el mundo lo conoce, incluso tu hermano lo juega, también james, todo el tiempo.

—Oh, ya se cual es. Aunque si soy honesta, nunca le he entendido. —me encogí de hombros.

—No es complicado. —dijo él dándole un sorbo a su café.

—Yo quiero que me lleves a un partido del Real Madrid, mami. —dijo James con la boca cubierta de chocolate.

—No sé qué es eso, pero si no hablaras con la boca llena, lo haría. —dije mientras dejaba la taza en la mesa y cogía una servilleta para limpiarlo.

—Es un equipo de soccer. El mejor equipo de soccer. —dijo bruno.

—Oh. —dije asintiendo como si estuviese interesada en el tema. A veces yo solía ser un poco pesada.

— ¡Eras Julieta! —gritó james riendo.

—Era tonto, lo sé. —dije riendo también.

Estábamos mirando mis antiguos vídeos, Love Story en este caso, James y Bruno se estaban burlando de todo: el vestuario, el escenario, el chico, mi peinado.