Capítulo 35

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Hugo la coge y la lleva a la cama y la sienta en sus piernas.

- Hugo: cariño a mí me da igual que te vean que nos vean juntos o no. Porque yo te quiero, te amo y solo te quiero a ti. Claro que me jode que por culpa de mi trabajo al ser una persona pública no te pueda disfrutar como me de la ganas, no poder ir a tomarnos algo sin que nadie nos rodee ni nada. Pero yo tengo claro que tu eres mi amor y que yo disfruto de nosotros da igual donde estemos, tengo claro que estando en casa podemos abrazarnos y puedo besarte todo lo que quiera, y en la calle no te puedo comerte a besos cada dos minutos, pero si pudiera ir por la calle cogidos de la mano y cuando quiera cogerte y besarte no dudes ni un segundo que lo haría. ¿Por qué? Por qué no puedo separarme de estos labios que me vuelven loco (le pasa el dedo por los labios) creo que si no te estará hablando ya te estaría besando porque me muero ganas de besarte (se acerca a sus labios) no sabes lo que me gustas Eva, tanto por dentro como por fuera (le besa) dios como me gustan estos besos amor. Te lo digo mucho y es la pura verdad me robaste el corazón aquel día en la parada del autobús y desde ese día no me lo has devuelto, y por favor nunca me lo devuelvas porqué si me lo devuelves eso significará que ya no me quieres y eso va hacer que me muera, porque yo sin ti no soy nada. Mi motor eres tu. Amor nunca te lo he dicho, pero cuando te fuiste estuve dos meses encerrado en mi casa sin salir de casa, llego un punto que no podía estar en mi casa que me tuve que ir a Córdoba porque aquí todo me recordaba a ti y no podía vivir. Estuve muchas veces tentado en Córdoba de tirarme por la ventana porque yo no puedo vivir sin ti, amor por favor nunca me dejes.

Hugo le abraza y Eva se acurruca en el pecho de Hugo, ambos están llorando por las palabras de Hugo.

- Eva: amor yo soy feliz contigo y solo contigo, yo sueño contigo cada noche, en el cual damos el paso y formamos una familia, hasta sueño que nos casamos en la iglesia en Galicia, yo me quería casar aquí en Madrid por estar a mitad de los dos, pero tú me dijiste que, en Galicia en mi casa, allí nos casamos y veo como delante de mi al entrar entra nuestro pequeño o pequeña llevando nuestros anillos

- Hugo: cariño a cada palabra que has dicho he cerrado los ojos y me lo he imaginado y te acabo de ver preciosa con un barriguita de mami, después en el sofá sentada en mis piernas con nuestro hij@ en brazos y yo abrazando a los dos, y como no ver a la mujer más hermosa del mundo vestida de blanco dirigirse hacia mi, presidida por nuestro hij@. Cariño quiero una vida contigo

Eva le abraza

- Eva: yo también quiero una vida contigo

Hugo la besa, cuando se separa del beso por falta de oxígeno

- Hugo: ¿amor me das el permiso para practicar la búsqueda de nuestros hijos?

Eva se levanta y se vuelve a sentar encima de Hugo, pero está vez quedando de frente.

- Eva: ya estas tardando amor

Eva le besa y Hugo le sigue el beso subiendo el beso haciendo que suba de intensidad. Varias veces se funden en uno disfrutando de su amor.

OTRA VEZ TUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora