Peccatum

Capitulo 2 / mentir es malo

La habitación se quedó en silencio durante varios minutos, morlum solo pensaba en como acercarse a innotiam para que confiara en él, debería parecer alguien normal y amable, pero el era todo lo contrario el no le gustaba nada de eso,el era un ser oscuro y grosero, mantenía un bajo perfil en el mundo pero si quería podía hacer todo arder, pero no podía fallarle a su padre, no podía perder aquello que le daría el poder suficiente para ser libre del mandato de su padre.

Innotiam mientras tanto, quería ver si su padre vendría por ella. No tenía forma de contactarlo, era la primera vez que salía de su casa, ni siquiera planeaba hacerlo y mucho menos la habían preparado para ello y además lo había echo sin permiso, probablemente ya han regañado a su cómplice duis, así se llama era una chica que hacía todas las tareas y encargos que se necesitaban en su sociedad, era como la mano derecha de su padre y la mejor amiga de innotiam y le había cedido su lugar para ir a dejar un nombre nuevo al árbol sagrado.

Pero era la primera vez que innotiam iba, sabía ir, por las indicaciones que duis le había dado, pero no le menciono como regresar, innotiam intento regresar pero ¿que logró?, Si, logro caer en la tierra, en una ciudad desconocida y además peco demasiado, debería confesarse apenas llegar a casa.

Apenas se había dado cuenta que los nudillos del chico sangraban, además de aquellos raspones que tenía en la cara.
—oye Morlum ...
—te dije que no te aprendieras mi nombre, ¿Que quieres?
—tus manos—señalo innotiam con la cabeza 
—ah, esto, no te preocupes no es la primera vez—el chico siguió en sus cosas sin siquiera importarle.

Pero a innotiam su padre le había enseñado que debía ayudar a la gente cuando lo necesitaba y ella estaba buscando la manera de no comportarse aún peor de lo que ya había echo, así que en el baño intento buscar lo que necesitaba pero no lo encontro, lo busco en la cocina y le fue aún peor, intento buscar en las habitaciones, abrió una puerta pero los muebles estaban vacíos, siguió a la otra y parecía que allí era donde dormía Morlum, la cobija de la cama era negra, y las almohadas también.

Dentro de la habitación había un baño peor justo cuando iba a abrir la puerta de este, otra voz se escucho en la habitación.
—¿Que haces aquí?, Sal de mi habitación—exigio el pelinegro
—yo estaba buscando algo para tus heridas—se excuso la chica bajando la mirada y jugueteando con sus manos por el nerviosismo 
—¿Si te doy las malditas cosas dejaras de huzmear y saldrás de aquí?—ella asintio y salió de la habitación esperando a que Morlum le diera lo necesario.

Espero en la sala y el chico apareció, se sentó y comenzó a curarse.
—queria hacerló yo, después de todo te has peleado por mi—el chico suspiro cansado y le pasó las cosas para que lo dejara de una vez en paz, se acomodo a su lado y extendió sus manos.
—cuentame más sobre ti innotiam—le insistió el chico para matar el aburrimiento 
—¿Como que?— Innotiam estaba concentrada en las heridas y no buscaba hablar para no decir algo que no deberia
—como que haces en un lugar a donde no perteneces—ataco morlum
—ni siquiera sabes a dónde pertenezco—se defendió
—por que no quieres decírmelo, ¿Acaso crees que se lo diré a alguien?
—si te lo digo no me lo vas a creer
—dimelo innotiam ¿No confías en mí después de haberte salvado?

Innotiam se lo pensó un momento, él tenía razón despues de todo la había salvado, era el único que le había ofrecido ayuda.
—yo pertenezco a el cielo—susurro ella aún curandole las heridas
—¿El cielo?, ¿Por qué a el cielo?
—soy un ángel...
—¿Quien es tu padre?, Lo has mencionado mucho
—no recuerdo—mintio
—mientes
—no lo hago
—claro que lo haces, mentir está mal
—mi padre es dios—dijo la chica si  poder esconderlo más, no era buena bajo presión y el chico de por si ya la intimidaba bastante
—¿Dios?, ¿Por qué no está buscandote en ese caso?
—no lo se, eso es lo que quiero saber—ella suspiro cansada y apartó las cosas que Morlum le había dado, ya había terminado de sanarle las manos.