El profesor Kallego deambulaba por los pasillos de Babylus mas distraído de lo de costumbre, incluso algunos estudiantes que estaban en sus Batora haciendo escandalo se sorprendieron al no ser reprendidos por el severo demonio peli violeta.
Y es que algo estaba rondando su cabeza desde ayer... mejor dicho alguien, la joven enfermera ______ con la que se encontró en el vivero. Y es que se estaba preguntando porque no podía sacarse de la cabeza a esa mujer... es cierto que verla sin su acostumbrada bata de laboratorio que la cubría le resulto novedoso, puesto que escondía una muy buena figura, de hecho no podía quitarle la vista de su escotado vestido, lo reconocía, además descubrió su afición por los cactus y no se burló de ello, él odiaba a las personas burlonas, aquellos que no muestran consideración alguna por los demás y son problemáticos, pero esta mujer era todo lo contrario, comenzó a pensar que quizá encontró alguien con quien hablar a parte de Suichiro. Quizá se daría una vuelta luego por la enfermería para ver si tomo en cuenta sus consejos para el cuidado de aquellas plantas espinosas....
Pero de pronto su buen día acabo cuando un destello rojo en la lejanía se comenzó a acercar más y más... Al darse cuenta de lo que podría llegar a ser quiso huir, pero le era imposible superar la velocidad de aquel sujeto...
- Kallego san, ¿Cómo estás?- dijo Opera echándole un brazo al hombro.
- ¡Suéltame maldito!- dijo forcejeando con el pelirrojo.
- ¿Por qué eres así? ¿Acaso no recuerdas los buenos momentos que pasamos en nuestra juventud? Cuando hacías los mandados por mí...
- ¿Y llamas a eso buenos momentos!?- dijo soltándose de su agarre por fin,- ¿Qué haces aquí?
- Tengo órdenes del director de buscarlos a ti y a Balam,- dijo mientras miraba de un lado a otro con la mano sobre los ojos- ¿sabes dónde está?
Detestaba a Opera, él y el director eran la representación de todo lo que odiaba, solo quería alejarse lo más posible y no tener nada que ver con esas personas que siempre lo arrastraban a los problemas, pero lamentablemente el director era su superior...
- Suichiro debe estar donde siempre, en la sala de estudio, se la pasa leyendo allí.
- ¡Bueno entonces vayamos!- El pelirrojo lo tomo del brazo y comenzó a correr a gran velocidad arrastrándolo por los pasillos de la escuela hasta llegar a dicha sala.
Al llegar Opera golpeo la puerta pero entro de igual modo, encontraron a Suichiro inmerso en la tarea de hacer un dibujo, cuando los vio entrar se sorprendió y cubrió con un libro lo que estaba dibujando.
- Hum... Hola Opera san, Kallego, ¿Qué hacen por aquí?- dijo algo inquieto mientras se ponía de pie y se acercaba a los visitantes.
- Hemos venido a buscarte,- dijo molesto Kallego mientras se arreglaba la ropa- parece que el molesto Director nos mandó a llamar.
- ¿El Director nos necesita? ¿Para qué será?- se preguntó el gigante llevándose el dedo índice a la cara.
- No lo sé, pero vayamos de una vez así esto terminara pronto.- de repente el demonio peliblanco se asustó cuando, a sus espaldas, escucho decir...
- Que buen dibujo Balam...- se giró rápidamente y su temor se acrecentó cuando encontró a Opera con su dibujo en la mano.
- ¡No! – grito desesperado,- No lo veas, aún no está terminado....- el más alto trato de arrebatárselo de la mano pero Opera era más veloz y lo esquivaba con facilidad.
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Amor en Babylus
RomanceEres una demonio con un gran poder: todo hombre que te vea a los ojos queda perdidamente enamorado de ti.... pero parece que hay 3 demonios inmunes a tus encantos ¿Acaso será alguno de ellos tu amor destinado? PD: Basado en hechos del manga de Mair...