ʙʟᴜᴇ - ᴊᴀᴋᴇʜᴏᴏɴ

-ᴀᴍɪɢᴏꜱ-

Jake despertó antes de que sonara su alarma.

Se sentía raro, mejor dicho, estaba neutral, sin preocupaciones.

Se levantó de su cama cuando la estruendosa alarma invadió el silencio de su habitación, lavo sus dientes y bajo a desayunar sin tener especial hambre, como era costumbre.

Su teléfono vibro, lo miro extrañado, nunca le llegaban notificaciones a menos que sean de juegos o cosas por el estilo y estaban silenciadas cabe recalcar.

Su vista se fijó claramente en el mensaje de Sunghoon que decía "estoy afuera de tu casa", se atraganto con su café y maldijo a su memoria, poco le duro el sentirse neutral, ahora estaba feliz, le gustaba sentirse asi, aunque también estaba nervioso.

Jake tomo su mochila y se despidió de su madre y su tía, las cuales le dijeron al unísono, "Si algo te ocurre llámanos inmediatamente", solo asintió y salió de su hogar.

Cuando cerró la puerta y levanto la mirada se topó con la de Sunghoon, se había cambiado el pelo, ahora era pelinegro y con algunos rulos pequeños.

Jake se quedó pasmado, sin decir nada, no sabía que decir, pero si sabía que el ahora pelinegro se veía jodidamente bien, pensamientos impuros de adolescente hormonal, aléjense de mí, pensó Jake mientras veía como Sunghoon se le acercaba para saludarlo, realmente necesitaba dejar de fingirlear en su mente y recordar cómo se respiraba.

-Hola Jayke, ¿Cómo despertaste? -Jake solo le sonrió, es que enserio estaba en blanco, iba a extrañar el castaño de Sunghoon eso estaba seguro, no es que no le gustara el negro claro que no, le parecía demasiado lindo, se abofeteo mentalmente y respiro para poder hablar.

-Hola Hoon, desperté bien, bastante bien, a decir verdad- logra decir mientras se le escapa una pequeña risa, no entendía porque se sentía tan bien en ese momento, pero quería que se mantuviera asi, aunque sabía que no pasaría.

-Me alegra mucho lindo. -Musito Sunghoon, 911, si, manden una ambulancia se le olvido como respirar a Jake.

-Deberíamos comenzar a caminar, se nos hará tarde- pronuncio el coreano mientras veía como su acompañante seguía sin decir nada, Jake solo asintió sin decir más.

Caminaron en silencio mientras Jake se perdía en las personas que pasaban o los pocos y recurrentes paisajes que veía, en cambio, Sunghoon se dedicó a pensar en su vida, y como esta dio un giro inesperado cuando vio desde la lejanía a un chico pelinegro con lentes bajar de un auto blanco junto a su madre hace ya 8 meses, ese invierno lo vio por primera vez y se sintió atraído por lo lindo que le pareció, el no espero eso, realmente no lo esperaba, creía ser 100% heterosexual, pero el universo tenía otras cosas planeadas, como que en esas mismas vacaciones de invierno se dedicó a pasar por ahí con la esperanza de verlo, supo que no era lo que creía y ser dedico a cuestionarse su pasado, realmente se sorprendió por no darse cuenta antes de que le gustaban ambos géneros, también esas vacaciones decidió que todos lo sabrían, no le importaba las opiniones solo deseaba poder volver a sentirse seguro de sí mismo y de lo que era, toda la escuela lo supo, nadie le dijo nada, de todas formas le dio paso a que algunos chicos se le declararan, en su opinión fue incómodo, realmente era incómodo para el negar cosas, era algo con lo que nunca vivió.

Cuando vio a Jake en los baños a inicios del ciclo escolar se dio cuenta que iban a la misma escuela, ese día decidido se llenó de valor para preguntarle cómo estaba en las afueras de su hogar, ese día se decidió a acercarse a él, sabía que posiblemente sus sentimientos no fueran correspondidos, pero se conformaría con su amistad. Amigos, realmente deseaba ser más que eso, pero debía conformarse con eso.

Antes de lo esperado estaban en la escuela, ninguno se dio cuenta hasta que llegaron a la entrada de esta, tampoco les importaba.

Sunghoon se aseguró de dejar al australiano en su salón para luego dirigirse hasta el de él, quedaron de verse en el receso del almuerzo nuevamente, esta vez quedaron de que Sunghoon se sentaría con Jake y no viceversa, ya sabemos lo que paso.