La puerta de la casa de Ryan se abre y entramos. Al momento en el que él cierra la puerta, el mismo me empuja hacia ella y comienza a besarme. Mis pulmones se quedan sin oxígeno otra vez y siento como la sangre calienta mis brazos. No puedo quedarme alli atrapada entre la puerta y el, sólo aceptando sus besos, así que le quito la chaqueta de cuero como puedo, porque sus manos están en mi cadera. Recuerdo todos los fajes que hemos tenido y algunos fragmentos de libros que he leído y películas que he visto, que tienen este tipo de escenas para poder saber que hacer. Pero esta ocasión es diferente, todas las otras veces sabía que solo sería un faje y no llegaria más. Pero ahora se que habrá algo más, algo en lo que soy inexperta, el tiene razón no soy sexy, cuando trató de serlo pienso de más y lo arruino todo. No me llegan más que unos cuantos pensamientos. Mi mente esta bloqueada por culpa de sus besos ¿Que hago? Ryan me aprieta cada vez más, hasta que mis rodillas comienzan a sentir dolor por estar chocando con las de el y en un momento mis piernas saltan y rodean sus caderas.
-¿Quieres ir a la recámara?-me pregunta de golpe y jadeando. Aunque mi propósito siempre fue estar esta noche con el en una recámara, mi corazón se acelera mucho más y mi cabeza se vuelve un desastre ¿Quiero ir a la recámara?
Si quiero hacerlo, pero por nuestro amor. Sin embargo con todo este comportamiento raro y las cosas que me dijo Jess, comienzo a dudar.-¿Ari, si quieres?-me pregunta de nuevo y eso me saca de mis tontos y confusos pensamientos.
Mi boca no emite ningún tipo de palabra o sonido y sin pensarlo asiento.
El me lleva cargando y me sigue besando. Nunca antes me había besado tanto y con tanta ¿pasión? No se si es un buen término para describir sus besos en este momento. En el lago, sus besos eran fuertes, rápidos y yo pensaba que era pasión como creí hace unos segundos, pero no creo que así sean sus besos. Siento que todo sigue igual de rápido que hace unos minutos en el lago, siento que tiene prisa de tenerme como si me fuera a ir.
Sin darme cuenta, ya estoy sentada en la cama que tiene unas colchas color miel. Ryan se ha separado de mi y me observa.
-¿Estas segura de que tu quieres....?-me pregunta.
Y yo no me muevo. No digo nada y sólo lo miro a los ojos.
-Ya te he dicho que no quiero hacer nada que tu no quieras hacer.-me dice. Su voz es gruesa, un poco impaciente. Y yo sigo sin decir algo, empiezo a pensar que mis cuerdas vocales han dejado de funcionar o que mis labios se han pegado por tanta saliva de su boca. Cualquiera de las dos es una gran posibilidad .-Ariana, por favor dime si lo quieres hacer.-vuelve a insistir. Esta claro que el tiene una gran necesidad y un deseo de hacer el amor conmigo, y yo también, así que lo que hago es asentir.
-Bien, en un momento vuelvo.-me dice con una sonrisa traviesa y seductora. Toma una cajita de un cajón y se mete al baño. Supongo que son condones...pero ¿Por que tendría condones en una casa que visita dos o tres veces al año? Me concentro en observar toda la recámara; se ve muy limpia y ordenada, no hay polvo. Supongo que alguien viene seguido, talvez su hermano Cody, porque dudo que Ryan lo haga.
Al escuchar que la cerradura de la puerta del baño se esta abriendo, mis labios automáticamente fórmulan una sonrisa para mi novio. El también me sonríe y deja la caja en el cajón.
Sin dudar un segundo, se abalanza sobre mi y comienza a besarme de manera ruda ,pero poco a poco sus besos toman una forma suave. Sus manos frías se meten por debajo de mi blusa y las mías se van hacia su espalda para quitarle la camisa. Sus labios se van a mi cuello dejando que mis dientes muerdan mi labio inferior. Todo lo bueno comenzaría en el momento en el que me quitará la blusa, y en el que yo le quitará el cinturón. Mientras yo pienso mi siguiente movimiento, el ha bajado mi falda unos cuantos centímetros. Cuando ve que lo estoy observando, sus manos suben hacia mi espalda por abajo de la blusa y desabrochan el brasier. Tan sólo de sentir el contraste de mis pechos desnudos con la seda, un escalofrío recorre mi cuerpo entero. Me esta quitando la blusa y un suspiro sale de mi.
Un brillo familiar en sus ojos aparece y sonríe de lado. Le gusta mi apariencia desnuda, bueno mis pechos desnudos.
-Eres perfecta.-me dice con voz temblorosa y escucho el latido de mi corazón. Como respuesta sólo sonrió. Mis manos bajan al borde de su pantalon, donde se encuentra el cinturón. Con lentitud se lo quito de la mejor manera que puedo. El se entretiene otra vez con mi cuello y yo le termino de quitar los pantalones. Baja de mi cuello a mis pechos, juguetea con ellos un buen rato, lo que me tiene loca de placer, baja con su lengua por mi abdomen, finalmente me quita mi ultima pieza de lencería, y justo cuando el se quita la suya, me doy cuenta de que en realidad no estoy lista. O mejor dicho no lo estaba; porque la acción comenzó.
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Mi novio imaginario
RomanceDespués de una gran decepción amorosa y un accidente, la mente y vida de Ariana jamas volverá a ser la misma. Comenzara a imaginar una nueva persona en su vida. La sed de amar, y un corazón roto hará que su mente la engañe, pero ¿Sera buena idea ena...