Capítulo 12

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Después de haber estado tanto tiempo en el carro, lo único que quiero es darme un baño y meterme a la cama. Salgo del carro con rapidez, pero avanzo hacia la puerta principal de mi casa con lentitud. Giro de la cerradura, y la puerta no se abre, entonces recuerdo que no hay nadie en casa y yo no llevé conmigo las llaves. Me recargo en la fría madera de la puerta y me dejo caer hasta estar en el tapete que tiene la entrada. Me pongo a pensar en todo lo sucedido y como es que mi suerte cambio en cuestión de horas.
Me levanto del tapete, porque siento que hay algo debajo de el, y eso incomoda a mi trasero. Entonces recuerdo que hay un repuesto de la llave debajo de el. Levanto el tapete agarró con fuerza la llave y como una loca desesperada abro la puerta. Entro a la casa y tan sólo prendo el foco, este se funde. Mierda, mierda, este ha sido un día de mierda. Vuelvo a la entrada y me dirijo al carro de Ryan, el siempre trae consigo una linterna, y espero que hoy no sea una excepción. Abro la puerta del copiloto, y después en la parte de abajo de esta, la encuentro; y no me refiero a la linterna, he encontrado una carta de J.

Mi novio imaginarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora