𝐀𝐬𝐡𝐄𝐢𝐣𝐢 - N̶o̶t̶ ~𝙹𝚄𝚂𝚃 𝚂𝙴𝚇~

Sólo para ti.

Eiji entraba al departamento después de un entrenamiento muy cansado.

Se había mudado a Estados Unidos con Ash. Eran una pareja tranquila y normal.
Aslan comenzó a estudiar un diplomado en varias cosas, obviamente esto era solamente para reafirmar sus conocimientos con un papel, ya estaba trabajando para una empresa en el área de informática, pero al parecer quería hacer investigaciones para dar aporte a la ciencia.

El terminaba la universidad y había vuelto a sus entrenamientos de salto.

Llegó arrastrando las piernas, últimamente estaba muy cansado y extrañaba a su flamante novio rubio.
Para su sorpresa estaba ahí, sentado en el sillón con un libro. Vestía su bata blanca, camisa negra de cuello alto y pantalones negros que hacían resaltar un fajo grueso.

- Hey... ¿Qué tal el entrenamiento? - pregunto feliz al verlo.

Se tiró en el respaldar del sillón por la parte de atrás para quedar al lado de su rubio. Su cadera quedaba arriba del respaldar, su cabeza casi rozaba el asiento, en esa posición su trasero quedaba levantado en el aire y solamente tenía puestos unos shorts cortos. Hacia mucho calor.

- ¿Bien? - dijo cuestionandose aquello.

- Me preguntas? ¿Qué pasa, Eiji? - despegó la mirada del libro y volteo a su lado derecho donde yacía su novio tirado.

- No eres cariñoso conmigo. - saco su labio mostrando un puchero.

- Dame un beso, cariño. - el pelinegro levanto su torso para quedar más cerca a su chico y se besaron. Fue un beso lento y dulce. - Contento? - iba a volver al libro.

- No. Siempre estás ocupado y no me das atención. - reclamo infantilmente a propósito.

- Suenas muy cansado, te traeré agua. - el rubio se levantó hacia la cocina. El asiático se quedó allí recordado, su espalda se estiraba por la pose y era relajante. Pero venía con una sorpresa, esperaba aguardar unas horas, pero era perfecta la situación. - Levántate de ahí. Ten, amor. -

El rubio se quedó mirando la pose en la que estaba su bello novio. Podía ver todo su trasero levantado en esos bonitos shorts azul marino.

El chico se levantó y bebió todo el vaso de una. Sonrió por la mirada que tenía su pareja. Dejo el vaso a un lado y comenzó su ataque.

- ¿Te gustó lo que veías, amor? - pregunto en tono coqueto mientras acariciaba con provocación los hombros de su alto chico. - ¿Me pongo así se nuevo? - volvió a preguntar susurrando en su oído.

Estaba metido en brazos del rubio, bajo un poco el cuello de la camisa y beso.

- ¿Sabes cuánto me has desatendido? Te extraño tanto, Ashu. - concluyó con el acento que sabía, le gustaba mucho a su novio.

Vió como se quedaba callado y simplemente regreso a la posición, dejo su bonito y bien formado trasero levantado, lo movió ligeramente hasta que sintió a su chico restregarse contra el.

- Mmm... Estás duro tan rápido, amor? -

- Desde que entraste y te ví vestido así. - respondió mientras masajeaba su bulto en unas lindas nalgas. Comenzó a besar la espalda del dueño de tan hermoso cuerpo.

Beso todo la espalda sin quitar la camisa deportiva blanca, le gustaba como lucía el japonés, se veía jodidamente sexy con su uniforme de deporte.
Sus besos siguieron hasta la espalda baja y lentamente fue bajando el short y calzón deportivo azul marinos.
Llevándose la grata sorpresa de un bonito círculo blanco. Su novio tenía un plug dentro de el.

- Y esto qué, Eiji-chan? - pregunto mientras movía la base del plug.

- Pensé en darte una sorpresa para la noche, me lo llevé pensando ponermelo en las duchas, sería más fácil. ¿Te gusta? - pregunto moviendo más sus caderas.