"Angel" - La Verdad (I)

17- Primer día de trabajo.

-¿Es una broma? -Preguntó John entre sorprendido y enfadado.

-Ya no me necesitas como antes, John. Además, seguiremos estudiando juntos sólo que será día de por medio.

-No me molesta tanto él hecho de que no vayamos a estudiar todos los días, sino más bien con quién estudiarás. Pensaba que ese Dash no te caía bien.

-Bueno, no me encanta la idea de estar con él, pero me necesita así como tú alguna vez.

-Es diferente.

-No, no lo es. Bueno, no demasiado. No será para siempre, sólo hasta que tome un ritmo.

-¿Thorne, ya lo viste? He oído los rumores, fue expulsado de varios colegios en él pasado, dicen que tiene antecedentes por peleas. Él y Patrick se mudaron para empezar de nuevo, pero esta clase de personas no cambian, él no "tomará un ritmo".

-Tengo fe en que si lo hará y lo ayudaré a hacerlo. Sé que estas preocupado por mi, pero creeme estaré bien, cualquier cosa sabes que te lo contaré.

Él me miro fijamente por unos segundos y se detuvo en mi mirada. Por último suspiró relajando él rostro y me dijo:

-Esta bien, gracias por confiar en mi.

-Gracias a ti por querer cuidarme.

-De eso nunca debes dudar, Thorne.

Vi en sus ojos confianza, me miraba con un brillo en los ojos que siempre estaba presente en cuanto hablaba conmigo, aquel brillo me hacia sentír muy protegida.

-Hey, será mejor que ya nos vayamos. No quiero llegar tarde a mi primer día de trabajo. -Dije sonriente.

-Tienes razón, vamos.

Teníamos la mesa llena de libros, hojas y apuntes que eran parte de una investigación de historia que debíamos hacer en pareja y John no había dudado en elegirme a mi.

Salimos al frío aire de noviembre y caía una leve llovizna, los rumores decían que probablemente empezaría a nevar pronto.

Por fin, después de mucho insistir, mis padres habían accedido a dejarme ir con John al trabajo sin necesidad de que ellos se molesten en hacerlo. Mi madre obviamente se quejó bastante, pero objete que no había pasado nada más luego del accidente, que estaba bien y que solo queria volver a a la normalidad. Ante eso mis padres no supieron que decirme así que accedieron.

De ida cuando cruzabamos la carretera con bosque al rededor no pude evitar sentir una puntada de dolor en él pecho. Él bosque...

Por mucho tiempo había sido él único lugar donde me sentía libre , un lugar donde mirará donde mirará yo estaba a salvo, aquel lugar donde habían tantas alturas desde donde se veían las nubes y estrellas con más claridad, y la sensación de libertad que te envolvía era como.una droga, algo que necesitaba desesperadamente.

-¿Estas bien? -preguntó John al ver, seguramente, la expresión de mi rostro apagado ahora ya por la añoranza que sentía.

-Sí, descuida.

-¿Hace cuánto que no vas? -preguntó y supe de inmediato que hablaba sobre él bosque.

-No lo sé, pero ya a pasado mucho.

-Es muy intenso lo que sientes cuando estas en él, ¿no?

-Sí... No es sólo él aire puro, él sonido tan natural, él olor a tierra fresca y la paz, es...

En aquel momento me dí cuenta que ya me había pasado, sin ser cociente me deje llevar frente a John asi que sólo calle de inmediato.

-¿Es qué? -insistió él.